Empieza a ser habitual que todas estas macroquedadas tengan su origen en las redes sociales. Al ser un evento público la difusión es máxima y viene gente de todas partes, como sucedió en la de “adictos a la gasolina”. Mañana, mi compañero Rodrigo Yufe os mostrará algunas de las imágenes que tomamos en la “3ª KDD Arrabasada”.
Pero hoy me adelanto yo con una rareza clásica que me llamó la atención en dicho evento, un Dino 308 GT4. ¿El Ferrari que no era Ferrari? ¿Por qué? Veréis, Ferrari solo comercializaba superdeportivos equipados con motores V12, por lo que un Ferrari con un motor inferior a esto no creian que estuviese a la altura de llamarse así. Es por eso que Ferrari, comercializaba estos coches bajo la marca Dino, ya que en su interior albergaba un V8.
Parecía algo inconcebible el construir un coche de 4 plazas con motor central. Todo el mundo imaginaba que este modelo sería un total fracaso al principio ya que parecía que Ferrari le hiciese un vacío. Aunque la mecánica fuese de Ferrari, no le permitieron ser portador del cavallino rampante… Obviamente, el pequeño Dino no era igual de rápido que los otros V12 de Ferrari, pero si que tenían un chasis excelente.
Todo el mundo se equivocó y se consiguieron vender 2826 unidades a finales de 1980, por lo que al desaparecer Dino, Ferrari quiso adoptar al pequeño Dino 308 GT4 y bautizarlo como un verdadero Ferrari en 1976. El que estamos tratando hoy en cuestión, ¡es uno de los poco Dino originales que quedan!
Si echamos un vistazo al interior, vemos un panel de instrumentos en el que destacan siete relojes, una palanca manual de 5 velocidades, y una triple entrada de aire situada en el centro. Nada de lujos, lo suficiente para hacer funcionar el pequeño Dino. En cuanto a la comodidad, pude fijarme en que las plazas delanteras eran bastante amplias, por lo que intuí que debían que ser bastante cómodas, todo lo contrario que las traseras, algo justas.
¿Por qué Dino tiene tanta relación con Ferrari? Dino era el hijo de Enzo Ferrari, desgraciadamente falleció de enfermedad en 1956 y su nombre fue utilizado para honrar su memoria.
El potente V8 del Dino 308 GT4 parece que si que merecía llevar la marca de Ferrari. Entre las especificaciones del Dino 308 GT4 destacan que era un 3.0 litros de 225cv a 7700 rpm. que le permitían alcanzar más de 250km/h. Además tan solo pesaba 1150 Kg, por lo que imaginamos que debe de ser un coche muy ágil.
Después de haber visto cientos de coches en aquella quedada, estoy seguro de que muy pocos llevan a sus espalda historias tan sensacionales como la del Dino 308 GT4.