Dione con Encélado al fondo.
(Fuente: www.nasa.gov)
Dione es un satélite de Saturno descubierto por Giovanni Cassini en 1684. Cassini seguramente os sonará de algo, ya que es la sonda que actualmente está estudiando Saturno y sus alrededores, además de ser la responsable de este descubrimiento. Se trata de una de las principales lunas del gigante de los anillos y pertenece a la especie de lunas medianas heladas, debido a la corteza de hielo que tienen en su interior. Dentro de esta familia encontramos satélites como la propia Dione, Encélado, Mimas, Tetis, Rea... Su superficie está llena de numerosos cráteres provocados por meteoritos y fue fotografiada por primero vez por la sonda Voyager 1.
Y ahora entremos en materia. Los investigadores del Observatorio Real de Bélgica han demostrado que los datos de la gravedad de Dione no se pueden explicar sin un océano en su interior. Los datos fueron obtenidos durante el último sobrevuelo de la sonda Cassini sobre la luna y parece ser que la masa de agua se ubica a 100 kilómetros de profundidad. El océano, al igual que en Encélado, tiene varios kilómetros de profundidad y rodea al núcleo rocoso que hay en su interior. En aspectos generales, esta luna se parece mucho a su hermana, pero hay algunos detalles que la diferencian. Los océanos en Encélado fueron, en parte, descubiertos por los géiseres que expulsaban el agua cerca del polo sur. Sin embargo, la corteza de Dione es demasiado gruesa para que el agua se haya abierto paso hacia el exterior, por lo que no podemos confirmar este descubrimiento mediante imágenes, tal como hicieron los científicos hace poco también con Europa.
Claramente no podemos terminar esta entrada sin la misma pregunta de siempre, ¿hay vida en Dione? Cuando hablamos de vida nos referimos a bacterias y otros organismos unicelulares, lo suficientemente simples y a la vez resistentes para sobrevivir en esas condiciones de absoluta oscuridad. Como ya publicamos en entradas anteriores, la presencia de agua no hace posible la existencia de vida, ya que se necesitan dos factores más: moléculas orgánicas y energía. La primera está casi confirmada, la segunda no podemos decir nada, pero la tercera es algo más complicado. El océano de Dione, al estar recubierto por una gruesa corteza, no tiene acceso a la luz solar, por lo que una forma de vida basada en la fotosíntesis es imposible. Por otro lado está la energía del núcleo. No hay pruebas de que este pueda ser una emisión de calor, por lo que es algo muy difícil, pero no imposible. Las condiciones son algo duras, pero tal como hemos visto en la Tierra, la vida siempre se abre paso, así que... ¿por qué no puede hacer lo mismo en Dione?