Revista Cocina
Menudo compromiso cuando nos hacen esta pregunta: ¿Dónde Comer en Valencia? Sustituyase Valencia por el nombre de nuestro lugar de residencia habitual. Y no por que sea difícil de responder, sino por que los gustos y los bolsillos no son exactamente los mismos y la escala de valores tampoco.
Hecha esta aclaración, quizás debía haber llamado a este post Donde me gusta comer en Valencia, pero en fin, eso se supone, ya que os lo cuento desde la ventana del blog.
Vamos a lo que importa y que es el ramillete de direcciones donde me gusta comer. Hay para todos los gustos y para todas las ocasiones. Todas son de Valencia ciudad y provincia, pero también he querido añadir un par de referencias que sin ser valencianas quedan bastante cerca y son una buena eleccción para una escapada de domingo, y no sólo por lo que a restauración se refiere.
Una aclaración más, el orden en que aparecen los restaurantes es casual y no responde a una clasificación que yo haya querido hacer. Para conocer más sobre ellos, pinchar sobre su nombre y os llevará al post que en su día fue publicado, con más información y fotografías.
Comenzamos por Alma del Temple, comiendo junto a la muralla, en pleno centro histórico de Valencia, ideal tanto para comer como para cenar en un ambiente relajado, sencillo y elegante.
Goya Gallery, un local con mucho encanto y uno de los más recientes en Valencia. Viene pisando fuerte y con muchos puntos fuertes: una carta extensa y bien trabajada y una sala preciosa y ... elegantemente informal.
Saiti, el Restaurante de Vicente Patiño. Local pequeño, de decoración agradable y con varias opciones de menús degustación, además de la carta. Buena carta de vinos. Recomendable tanto para cenas como para el mediodía.
Seu Xerea, matices asiáticos en una cocina de base mediterránea. Interesantes sus propuestas de menús de mediodía, cambian todas las semanas y siempre sorprende.
La Galette, un pequeño restaurante con mucho sabor bretón en pleno barrio de Ruzafa. Deliciosas galettes dulces y saladas, quesos franceses, ensaladas y, entre otras cosas, también ofrecen la posibilidad de tomar unas buenas ostras, entre otras especialidades francesas. ¡Ah! Y para anotar en agenda: el tercer jueves de noviembre celebran la llegada del Beaujolais, una opción buenísima para disfrutar de esta fiesta.
En pleno barrio del Cabañal, a dos pasos del mar, Bodega Casa Montaña. Un referente indispensable como bodega y también para comidas o cenas de picoteo, no demasiado formales, pero con materia prima de calidad.
Y si nos apetece un buen plato de pasta o de otras especialidades italianas, en un ambiente informal y con una buena relación calidad precio Sorsi e Morsi es la opción adecuada. Dispone de dos locales, uno en el barrio de Ruzafa y otro justo enfrente de la Ciudad de las Ciencias.
En Bétera, a escasos kilómetros al norte de Valencia, Genuí, autenticidad y pasión en un entorno privilegiado. Pasión por la cocina que se refleja en sus menús y en la carta, rodeados de naturaleza y en un edificio cuyas salas invitan a disfrutar, más si cabe, de los platos.
Si nos va el campo, el senderismo, pasar un día al aire libre, Chulilla, los Calderones y sus rutas son una muy buena opción a pocos kilómetros de Valencia. Restaurante El Pozo es mi recomendación para ponerle un buen broche final a esta escapada.
Pero si preferimos el mar a la montaña, Casa Salvador, junto al Estany de Cullera, es el lugar ideal para disfrutar de un buen arroz y de platos marineros en su magnífica terraza. Una buena opción tanto para comidas como para cenas de verano.
Más de un domingo solemos escaparnos a Denia, ya en la provincia de Alicante pero a una hora de Valencia. Disfrutar de esta villa marinera, pasear por el puerto, por alguna cala y quedarse a comer por allí, es todo un regalo.
El Tresmall, Sabores de la Tierra frente al Mar de Denia, nos ofrece una gran variedad de arroces y paellas, bien cocinados, así como productos del mar de temporada.
Y para finalizar un Restaurante con Ángel, él del Hotel Los Ángeles. Excelente cocina mediterránea con mucha creatividad en sus platos, en primera línea de playa ¿se puede pedir más?.
Desde luego que son todos los que están, pero no están todos los que son. Así que no descarto en un futuro y a medida que vaya publicando mis experiencias, una segunda parte de este Dónde Comer en Valencia.
¡Que lo disfrutéis!