Una de las veces que viaje, estuve en la frontera de Melilla y una mañana me despertaron los gritos de un hombre. Cuando me asome por la venta para ver que sucedía, aquel hombre iba ofreciendo su mercancía a grito pelao. En cuanto pude distinguir que vendía, no dude ni un segundo y me apresure a comprarle el cubo entero. Eran sardinas. Y claro ahora os preguntareis... Que tenían de particular??? Pues que todavía estaban vivas!!!! Era increíble como chapoteaban en el cubo. Rapidamente cogí un cubo de la casa e introduje ahí mi desayuno. El cubo no creo que me costara mas de 4 euros. La señora de la casa las preparo para desayunar mientras yo me daba una ducha. La primera vez en mi vida que comía sardinas en el desayuno, y la verdad que nunca mas lo hice. Pero sigo teniendo ese bonito recuerdo y si me concentro incluso puedo llegar a recordar ese sabor intenso a mar.
Las que sobraron, las limpiaron y las guardaron en salmuera. Esas ya no las pude probar porque mis vacaciones se terminaban, pero segurisimo que estarían igual de ricas.
Otro día cuando llegue del paseo, al subir por las escaleras pude adivinar por olor que había pescado, lo que no me podía imaginar es que iba a encontrar doradas. Es un pescado que poca gracia me hace, pero cocinado de esta manera, es espectacular. Rescatando mis recuerdos he conseguido reconstruir esta receta, espero que sea de vuestro agrado...
Ingredientes:
- 4 doradas (1 por persona)
- 3 zanahorias laminadas a lo largo
- 2 cebollas rojas laminadas
- 1 pimiento verde a tiras
- 1 calabacin laminado a lo largo
- 1 patata mediana a rodajas
- 3 cucharadas de perejil picado
- 3 cucharadas de cilantro
- 2 dientes de ajo
- 2 tomates rallados
- 1 cucharada de tomate concentrado
- aceite de oliva
- 200 ml. agua
- 1 limón a rodajas finas
- Especias: comino, pimentón
- Sal
Primero vamos hacer el mortero. Machacamos el perejil, el cilantro, los ajos, comino, pimientos y la sal. Cuando todo este bien mezclado lo dividimos en dos partes. Una parte la usaremos para "empanar" las doraras y la otra mitad para la salsa.
Limpiamos las doradas si no nos las han limpiado en la pescaderia. Le quitamos las cabezas y las tripas. Le damos unos cortes longitudinales.
La mitad de majado lo ponemos tanto por dentro como por fuera de las doradas.
En una sartén con aceite freímos las patatas con mucho cuidado de que no se rompan. Cuando empiecen a coger color las retiramos. Reservamos en papel absorvente.
Quitamos parte del aceite empleado y pasamos por la plancha el calabacin y luego el pimiento. Reservamos también.
Escaldamos las zanahorias.
Pochamos la cebolla.
Cuando tenemos toda la verdura preparada la vamos poniendo por capas en una fuente para el horno. Primero pondremos la cebolla, luego el pimiento, calabacin, patata y por ultimo la zanahoria.
Poner encima las doradas.
Mezclar los tomates rallados y el tomate concentrado, medio vaso de agua y un poco de aceite de oliva con la mitad de la mezcla que nos quedaba. Removemos todo bien y agregamos esta salsa por toda la verdura.
Ponemos las rodajas de limón por toda la fuente y tapamos esta con papel de aluminio.
Horneamos a 180 ° durante 20-30 minutos.
Como en casa son bastante especiales, antes de sacar los platos a la mesa, les quito todas las espinas para evitar accidentes, pero igualmente se pueden presentar las doradas enteras.
Espero que os haya gustado la receta. La conocías? Has comido alguna vez así las doradas?