El arte de la guerra, el arte de Collins

Hoy en día estamos tan expuestos a la realidad de la guerra que es posible que terminemos distanciándonos del dolor de los demás y de lo que realmente supone vivir en medio de un conflicto armado, si que es no lo hemos hecho ya. Pero no sólo somos nosotros, tanto los jóvenes como los niños también se ven sobrexpuestos a esta dura realidad, y el debate está en la calle: ¿es bueno hacerles entender la situación en la que viven? Unos estarán a favor y otros estarán en contra, pero ahora mismo hay una autora que es toda una experta en hacer entender este espinoso tema, y esa no es otra que Suzanne Collins.

La autora, que ahora es mundialmente conocida por la trilogía Los juegos del hambre - en la que explora las consecuencias de la guerra, los estados dictatoriales y el cinismo de la cultura de la popularidad-, comenzó su trayectoria con una serie de cinco libros que cuenta las aventuras de un niño de doce años que, desde la gran ciudad y a través de un agujero, termina en un mundo habitado por cucarachas gigantes, murciélagos, ratas y unos seres humanos con cierta tendencia violenta. Estos libros forman la serie Las crónicas de las Tierras Bajas, y están recomendados para niños de nueve a doce años, pero no penséis que por ello no tocan el polémico tema de las contiendas armadas; al contrario, descubriremos un asesinato, armas biológicas, un genocidio y el uso de la inteligencia militar. Todos estos aspectos fácilmente reconocibles, por desgracia, en nuestra historia real.

Ya sabéis que he ido leyendo toda la serie, y que cada vez que realizaba una reseña ésta era de lo más positiva. Pero todo se termina, y sé que echaré mucho de menos las andanzas de Gregor. La última aventura en las Tierras Bajas se titula Gregor. La profecía final, y me parece un libro perfecto para una serie increíble. Al igual que en Harry Potter, nos enfrentaremos a la idea de que tal vez las profecías no son inalterables, aunque manejen el destino de nuestros héroes y les induzcan a tomar decisiones difíciles. Hemos visto el desarrollo interno de Gregor: su lucha y la superación de todos los obstáculos; y también los cambios producidos en toda su familia. Hay mucha sabiduría en este libro; sólo por poneros un ejemplo, existe una escena en la que Gregor repasa todas sus cicatrices, y esto se puede extrapolar en un recordatorio de las que cada uno de nosotros lleva, sean visibles o no. También obtenemos muchas respuestas a las preguntas que quedaron en el aire en el libro anterior, y además nos hará reflexionar sobre la necesidad de la guerra.

Si entre Los juegos del hambre y Las Crónicas de las Tierras Bajas no queda patente que la violencia, los prejuicios y la lucha por sobrevivir son de gran interés para Collins, tal vez termine por convenceros saber que su próximo trabajo que verá la luz después del verano es una historia infantil e ilustrada por James Proimos, titulada Year of the Jungle, que está inspirada en el tiempo que su padre pasó como soldado en Vietnam. El libro tiene como tema principal la guerra de nuevo, y es que en esta cuestión ya no os puede quedar ninguna duda de que Suzanne Collins es toda una experta.