El republicano Lamar Smith, autor del proyecto de ley SOPA, critica indignado las objeciones presentadas por Google, Microsoft y Facebook, entre otros.
El controvertido proyecto de ley SOPA, o Stop Piracy Act, propone dar amplias facultades a las autoridades estadounidenses, para combatir la piratería tanto en Estados Unidos como en el extranjero.
Entre los organismos y empresas que se oponen a la propuesta figuran empresas como Facebook, Google, eBay, Twitter, LinkedIn, Mozilla, Microsoft, Tumblr y Zynga, junto con un gran número de empresas del sector TI.
A juicio de los detractores, la ley, en caso de ser ratificada, destruiría Internet en su forma actual, funcionando como una instancia de censura que no cumpliría su supuesto cometido de proteger los derechos de autor.Entre otras cosas, la ley propone bloquear sitios internacionales, bajo la sola sospecha de ser acusados de piratería por la industria estadounidense del entretenimiento. Smith respondió a las críticas en una entrevista telefónica con Reuters, diciendo estar sorprendido por la forma en que sus oponentes al parecer no se interesan por proteger los consumidores y negocios estadounidenses.Luego, en lo que podría ser una alusión directa a Google, preguntó "¿Acaso se benefician de dirigir consumidores a esos sitios extranjeros? ¿Lucran vendiendo publicidad a esos sitios extranjeros? Y si lo hacen, entonces es preciso frenarlos. Y no me importaría hacerlo personalmente".Según Smith, la piratería representa un perjuicio económico total de 100 mil millones de dólares anuales para las empresas estadounidenses.