En una noche oscura
con ansias en amores inflamada
¡Oh dichosa ventura!
salí sin ser notada
estando ya mi casa sosegada.
Perro semihundido (1821-1823).
Goya
Se puede prescindir hasta de aquello que parece más necesario, sólo hay que contar con factores que no están a la mano. San Juan de la Cruz, en Subida al Monte Carmelo, menciona que la primera noche oscura es "la privación y la purgación de todos sus apetitos sensuales acerca de todas las cosas exteriores del mundo".
Hay más noches. Hay tantas noches oscuras como noches. Noches sin luz, pero con ojos. El ojo también ve sin luz. Algunas cosas sólo es posible verlas en la oscuridad, como las estrellas. Visión no sensible. Unión que prescinde de conocimiento y se sirve sólo del amor. Conocimiento que prescinde de teorías, las arroja como maderas al mar. Troncos a los que se agarran tantos intelectuales, pero que no sirven para mantenerse a flote. Amor que prescinde de sí mismo, que se hunde, para amar.