El león cobarde y cómo conquistar tus miedos de emprendedor (II)

En el post anterior empezamos a hablar sobre el león cobarde y cómo conquistar tus miedos de emprendedor. Hoy, vamos a continuar, hablando principalmente de los 5 pasos que tienes que seguir para conquistar tus miedos (de la misma manera que lo hizo el león cobarde)

Cómo conquistar tus miedos

En la película el mago le entrega una medalla al León Cobarde y le dice que tiene tanto valor como un héroe.

La lección es que valor no es actuar sin tener miedo, sino a pesar del miedo.

Eso es algo muy profundo, pero también deja una pregunta sin respuesta: ¿Cómo convencerse a uno mismo para actuar cuando estás muerto de miedo?

Bueno, repasemos la historia.

1. Enfádate contigo mismo. Cuando el León Cobarde se encuentra con Dorothy y sus amigos en el bosque, está tan abrumado por la vergüenza que no puede dejar de llorar. Tiene tantas ganas de ser valiente que la desesperación le impulsa a ir a ver al Mago de Oz.

Es anti-intuitivo, pero para la mayoría de nosotros esa es la manera en que nuestra motivación se vuelve más poderosa. Si quieres hacer grandes cosas, deja de esperar a que llegue el momento perfecto y te sientas preparado. Eso no va a suceder nunca. Es mucho mejor que pienses que tu situación es una auténtica mierda. Pero una bien grande, de manera que te sientas frustrado contigo mismo, para que luego uses esa emoción para conseguir que las cosas cambien. La miseria es una herramienta útil. Utilízala.

2. Encuentra un buen mentor. El Mago de Oz pudo haberle dado al León Cobarde la medalla al coraje la primera vez que el fue a verle, pero no lo hizo.

En lugar de eso, le dio una misión, una oportunidad para crecer y para ponerse a prueba a si mismo, para poder descubrir que siempre había tenido aquello que estaba buscando. Eso es lo que hacen los buenos mentores. En realidad no nos dan nada, solo nos guían para que nos vayamos descubriendo a nosotros mismos. Y eso es fundamental.

3. Pon a prueba tus suposiciones. Al salir a buscar la escoba de la bruja mala, El León Cobarde puso a prueba la más grande de sus suposiciones, la de que era un cobarde, y terminó demostrándose a si mismo que estaba equivocado.

Esto es lo que todos nosotros tenemos que hacer. Una de las grandes lecciones de la psicología cognitiva es que no puedes confiar en tus propios pensamientos. Por ejemplo, la gente que está deprimida tiende a ver las cosas peores de cómo son en realidad. Al desafiar estas suposiciones te darás cuenta de que hay muchas cosas que no son tan malas como parecen y también verás que eres capaz de hacer muchas más cosas de las que crees.

Esa vocecilla que hay en tu interior en realidad no lo sabe todo. No prestes atención al hombre que hay detrás de la cortina.

4. Lucha por alguien más. El León Cobarde probablemente no hubiera hecho nada por sí mismo, pero cuando la malvada Bruja del Oeste secuestró a Dorothy, hizo todo lo que pudo para salvarla.

La mayoría de nosotros somos así. Luchamos con 10 veces más fuerza por nuestros amigos que por nosotros mismos. Así que, ¿por qué no aprovechar esta circunstancia?

Si te fijas en el pasado de casi cualquier emprendedor de éxito, verás que casi todos tenían compañeros que les animaban, que dependían de ellos y que les motivaban. Es una fuente perpetua de motivación y puedes utilizarla para hacer cosas que hubieses pensado que no eras capaz de hacer.

5. Recuérdate tus éxitos a ti mismo. Cuando el León Cobarde volvió triunfante, el Mago de Oz le dio una medalla por su valor y le recordó que era un héroe.

La mayor parte de la gente no es consciente de ello, pero en las novelas que siguieron al libro El Maravilloso Mago de Oz, el León Cobarde siguió haciendo proezas y siguió sin tener miedo. Se recordaba a si mismo lo que había sido capaz de hacer en el pasado y seguía adelante.

Una de las mejores maneras de construir confianza en uno mismo es teniendo un diario con tus propias victorias sobre las cosas que te dan miedo y leerlas cada cierto tiempo para darte ánimo a ti mismo. Todos nos solemos acordar de nuestros fracasos, pero llevar un registro de nuestros éxitos es una manera muy buena de mantener el espíritu positivo.

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