En la vida humana, existe el mundo de las sombras, caminando entre los vivos. Con apariencia humana, pasan desapercibidas. A veces esas sombras son demonios disfrados de una triste presencia que puede pasar sin ser reconocida.
Las sombras no pueden hacerte nada que no sea robarte energía y frente a la luz se desvanecen y desaparecen. Por eso no debes tener miedo nunca, solo buscar la luz que eres y existe para iluminar las sombras que aparezcan en tu camino.
Los demonios aparecen en nuestras vidas para robarnos nuestra energía positiva, pero eso nuestros demonios son solo sombras que se desvanecen con la luz del sol.