Corría principios de septiembre cuando finalizó el periodo de alegaciones del Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas. Una jugada mezquina por parte del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino ya que todo este proceso, obligatorio según la legislación vigente y vitalmente necesario para un proceso democrático sano, se desarrollara, casualmente, en pleno mes de agosto. Y todo para enmascarar las sorprendentes descatalogaciones que se produjeron en el catalogo.
Dejando las polémicas a un lado, el nuevo catálogo aglutina un total de 900 especies, tanto vegetales como animales, en dos únicas categorías: “En peligro de extinción” y “Vulnerable”. Nuevamente, el ministerio obliga a las comunidades con alguna especie catalogada en cualquiera de las dos categorías a desarrollar las estrategias para la conservación o recuperación de dichas especies. Esto no es nuevo ya que dichos planes deberían haberse presentado ya en diciembre de 2010, y de hecho 12 comunidades no han presentado ningún tipo de plan para las especies catalogadas como “en peligro” en su territorio, a fecha de 2011. Ya que tengo la oportunidad, decir que la Comunidad Valenciana hace tiempo que tiene instaurados varios de estos planes para diversas especies, salvo la vergonzosa excepción de la cerceta pardilla (Marmaronetta angustirostris), “En Peligro de Extinción” en el nuevo catálogo.
Cerceta pardilla (Marmaronetta angustrirostris)
Por lo demás, lo más destacable que aporta el nuevo catálogo es la posibilidad de la inclusión, cambio de categoría o exclusión de cualquier especie por iniciativa popular. Así cualquier ciudadano u organización podría modificar el catálogo, eso sí, siempre con la correspondiente información científica que la justifique. Así, perfectamente cualquier friki que tuviera un blog, ya sea compartido o individual, podría solicitar, tras la consecuente recogida de firmas, a la Dirección General de Medio Ambiente la inclusión de, por ejemplo, la población navarro-riojana de castor europeo (Castor fiber) puesto que, a su entender, se ha cometido una irregularidad ya que en el Artículo 6.2 del catálogo se cita lo siguiente:
En el caso de especies que figuran como protegidas en los anexos de las normas o decisiones de la Unión Europea y los convenios internacionales ratificados por España, su inclusión en el Listado se efectuará de oficio por el MARM, notificando previamente tal inclusión a la Comisión Estatal para el Patrimonio Natural y la Biodiversidad. En este supuesto, sin perjuicio de su inclusión en el Listado, a efectos del régimen concretamente aplicable y de la inclusión, en su caso, en el Catálogo se podrá considerar la singularidad de la distribución geográfica y el estado de conservación de la especie en nuestro país, previa consulta a las comunidades autónomas o ciudades con estatuto de autonomía afectadas.
Y si, por alguna de aquellas, se le ocurriera mirar el Anexo II de la Directiva de Hábitats, de obligatorio cumplimiento por parte de todo estado miembro de la Unión Europea, se quedaría un poco extrañado puesto que se cita a susodicho roedor, muy majete por otra parte, como “una especie animal de interés comunitario para cuya conservación es necesario zonas especiales de conservación*“. Siguiendo con el supuesto friki, éste fruncirá su ceño, indignado, puesto que, aunque halla sido introducido de forma ilegal, en aplicación del ya mencionado artículo se tendría que haber catalogado como “En Peligro de Extinción” y no permitir su exterminio por parte de las administraciones de Navarra y La Rioja. ¿Y qué hará ese friki? Puede que se ponga en contacto con alguna entidad ecologista de la zona.
* Excepto para las poblaciones estonias, letonas, lituanas, finlandesas y suecas.
PD: Pido disculpas a los lectores por la tardanza en publicar un post sobre este tema. Pues el Catálogo fue publicado el miércoles 23 de febrero, entrando en vigor al día siguiente. Por diversos motivos, entre los que destacan los labores y la dejadez, me han imposibilitado publicar esto con anterioridad. Como diría Krusty: ¡Mil peldoneees!.