El perfume

ffffound.com te escribo una carta para que tú sepas lo que ya sabías Bunbury Si me das a elegir entre un sabor y un olor, probablemente elegiría el olor. Descartaría el profundo lapso de alcohol sobre mi lengua viva, más que nunca, para decantarme por el olor. Un aroma persistente y penetrante, que tal vez no indague en las cavernas nasales y se propague, simplemente, por el aire, por el viento a favor. Cualquier plan, así descrito, lleva el sí atado de forma natural, porque puede ser veneno o antídoto, puede ser colonia o perfume, puede ser arte o simple construcción, pero sea lo que fuere, es un olor inmortal, imperecedero, transparente. Un olor que se transmite por la piel, por el sexo, por los labios o por las camisetas de Burning. Nadie puede saberlo con certeza. Nadie puede controlarlo. Pero, sinceramente, no creo que ninguno de nosotros, a estas alturas, pretenda controlar nada. Solo dejarse llevar y vivir. Hace no tanto tiempo nos creíamos muertos.