Hemos podido ver como, prácticamente, todos los precios de las materias primas, de un año para acá se han desplomado, más sin embargo, esto no se refleja de forma contundente de los indicadores inflacionarios, tanto de México como de EEUU. Como se ha establecido en un artículo anterior, la economía de nuestro país es totalmente dependiente de la de nuestro vecino y para este problema, en particular, lo abordaremos, más adelante.
Tipos de inflación
Existen dos tipos básicos de inflación, la general, también conocida como índice de precios al consumidor (CPI) y la subyacente (Core inflation), mientras la primera consiste, básicamente, en toda la canasta de bienes de uso personal, la segunda es una canasta que excluye precios de alimentos y energéticos, por ser, supuestamente, más volátiles
La cadena de producción y suministro
Ahora bien, no porque una serie de materias primas sean el componente básico de un conjunto de productos y servicios significa que tienen una correlación fuerte, en cuanto a precios, con estos últimos, al menos, simultáneamente.
La razón de lo anterior es muy simple y está contenida en el subtítulo de este apartado, hay todo un proceso de transformación de las materias primas antes de ser bienes para consumo final. Este proceso de transformación implica mano de obra y transportación, además de otros costos eventuales o temporales como impuestos o shocks que interrumpan la cadena.
Ponderación de bienes
Otro aspecto que influye a que los cambios en precios de materias primas no se vean, proporcionalmente, reflejados en el indicador de precios al consumidor, es la ponderación de bienes que estos tienen dentro de la canasta. En el caso de este este indicador en los EEUU, la vivienda, los costos de alquiler tienen de las mayores ponderaciones, así como transporte. Y es que según las políticas y métodos de cada país unos bienes son de mayor relevancia para el consumidor, según la situación económica del país, de esta forma, aunque los precios del petróleo se desplomen, tendrá mucho menos impacto en el indicador, tanto por lo mencionado previamente, como que los costos de vivienda poco o casi nada tengan relación con los precios del oro negro.
El caso mexicano
Así como en EE.UU, el indicador de la inflación o precio al consumidor en México, se compone por una serie de producto y servicios con una ponderación distinta. De hecho, los alimentos y bebidas son los bienes de mayor ponderación con un 30% del total,además, el maíz, el trigo y el arroz que se consume es, mayormente, importado de los EE.UU y cuyos precios tampoco han dejado de subir, lo que mantiene a nuestro país sujeto a las condiciones y circunstancias de su vecino.
Así mismo, también tenemos el problema de los combustibles, principalmente, gasolina, también importada en su mayoría de los EE.UU, y que desde la pandemia han sufrido un alza importante en aquel país, que lógicamente, repercute en el nuestro.