El ratón... y el gato

Cuando el mouse del ordenador empieza a fallar me siento como Mr Jinks, contra Pixie y Dixie, como Tom contra Jerry.
Vamos, que siempre tengo las de perder. Que si empieza a fallar la pila y me da pereza cambiarla, que si el botón de clicar se encalla, que si el puntero se atasca, que si el botón derecho no chuta...
Que si la página tarda más de la cuenta en cargar y uno, impaciente, le da al botón antes de tiempo y justo en ese momento la página acaba de cargar y en vez de clicar lo que quieres has accedido a otro sitio que no interesa para nada, ya sea publicidad o cualquier otra cosa que te hace perder más tiempo aún.
Conclusión: en caso de guerra contra el mouse del ordenador no se debe aspirar a ganar la batalla, la guerra, siempre siempre siempre el ratón en cuestión saldrá ganador cual Jerry frente a Tom, cual Pixie o Dixie frente a Dr. Jinks...
Ahora, después de tantos años he comprendido el porqué del nombre de ratón para definir al objeto: porque siempre que quiera nos tomará el pelo y se reirá de nosotros mientras rabiamos de impotencia.
Ahora sólo me falta bautizar a mi ratón, casi que le llamaré Dixie, que el Dr. Jinks, con ese acento andaluz siempre me fue simpático.
En cualquier caso al gato siempre le queda la opción de cambiarle la pila al ratón o sustituirle por otro de úiltima generación que inevitablemente a la larga acabará riéndose del gato, como siempre.
A ver si mi próxima adquisición al respecto de puedo bautizar como Speedy González, que a la par de rápido no le toma el pelo a  ningún gato. Claro que con la suerte que tengo seguro que me toca Rasca y me toca hacer las funciones de Pica, el más pringado de los gatos "animados"
En esta página podremos encontrar una lista de los ratones animados más célebres:
http://listas.20minutos.es/lista/ratoncitos-animados-309369/
Así la próxima vez que vayamos al "Yo no soy tonto" le podremos pedir al dependiente el ratón que mejor se adapte a nuestras necesidades: quiero un Dico, quiero un Mickey Mouse, quiero un Super Ratón...
Con lo cual el slogan de la tienda informática deberá renovarse ante la dudosa veracidad del mismo dadas las extrañas peticiones de los clientes que tal que así obren.