Este lienzo del Señor Jesús "del Gran Poder" se encuentra en la ciudad de La Paz, Bolivia.
Se presume que el piadoso lienzo habría sido pintado por un autor anónimo de la Escuela Popular del Collao en el siglo XVIII, no obstante la historia de la veneración del santo lienzo comenzaría aproximadamente por el año 1826, cuando la novicia Genoveva Carrión ingresó al Convento de las Madres Concepcionistas, llevando consigo el místico lienzo de 3 rostros (1) que en síntesis representa a la Santísima Trinidad y su indivisible unidad.
Al morir la monja Genoveva Carrión, muchas monjas adoptaron el apellido Carrión, para de esta manera hacerse guardianas de la santa imagen, hasta que 2 de ellas, Irene Sarabia Carrión y Maria Belmonte Carrión, abandonando el convento (para vivir juntas hasta la muerte, segun los registros historicos) habrían pedido a este la devolución de la mística efigie alegando que les pertenecía por derecho de herencia. Al ser ambas mujeres que no tenían una casa propia, por necesidad debían de trasladarse constantemente a otros sitios para vivir y desde ese momento el lienzo se convirtió en peregrino de diferentes zonas y domicilios en la ciudad de La Paz, en los cuales se estableció poco a poco la devoción a la sacra imagen. Pronto comenzó a tener fama de milagrosa, ya que a las casas por donde iba la imagen se realizaban rosarios, rezos y oraciones en agradecimiento a los favores concedidos.
El constante traslado de la imagen también hizo que se generaran historias, entre estas resalta aquella que cuenta que el dueño de casa comercial “La Balanza”, en la calle Mercado, murió junto a su familia de una terrible enfermedad por haber exigido que la milagrosa imagen de 3 rostros en un solo cuerpo saliera de su domicilio.
Terminando las constantes peregrinaciones la imagen llego a la antigua Iglesia de San Sebastián y luego a la Capilla de Pura-Pura mas estas no fueron sitios permanentes, sino tan solo eventuales. El párroco de la zona El Rosario entre 1910 y 1920 hizo que la veneración al místico lienzo fuera más oficial y alquiló una casa en la zona de Chijini, sitio en el cual se quedó la imagen. Los habitantes de Chijini, emigrantes del área rural, decidieron rendirle veneración a la imagen con música, danza y vestimenta, así surgieron en 1923 las primeras fraternidades folclóricas. Con el pasar del tiempo los feligreses fueron aumentando y en 1928 se inició la construcción de una Iglesia denominada “Santuario del Señor Jesús del Gran Poder” en la zona de Chijini (hoy en la calle Gallardo), la Iglesia fue concluida a finales de los años 30.
En el proceso de evangelización se pretendió que los indígenas entendieran que el Dios cristiano (representado en el lienzo) del cual se predicaba era un Dios trino, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Sin embargo los indígenas interpretaron las cabezas como el Alaxpacha (el mundo de arriba), Akapacha (parte de este mundo) y Manqhapacha (el mundo de abajo).
Entre los años 1924-1934 el Obispo Augusto Seifert hizo cubrir las dos caras laterales dejando solo la que hoy se ve, con el fin de extirpar la costumbre que tenían algunos fieles de pedir al rostro izquierdo daño para sus enemigos, al rostro derecho bienes para sus amigos y al rostro del centro peticiones personales. De tal forma después del “repintado” la efigie quedo con un solo rostro, el del medio.
En 1943 se pretendió trasladar la sacra imagen a la Iglesia “Santisima Trinidad” o “Gran Poder Nuevo” (2), por órdenes del General Enrique Peñaranda (presidente de Bolivia) conjuntamente con la Curia Eclesiástica. Para el traslado de la efigie se realizaría una procesión, pero al momento de abrir el Santuario todos se llevaron un gran sorpresa pues el lienzo no estaba en su marco; solo quedaba una tela blanca. Por la ciudad se proclamaba que era un gran milagro que el lienzo desapareciera, pero la verdad, que muy pocos sabían, era que antes de que llegase la gente al santuario para la procesión, los principales miembros de la Junta de Vecinos habían decidido ocultar la pintura, entregándosela a los Agustinos Recoletos para su custodia. Pasando 20 días y una vez que la Junta de Vecinos obtuvo una escritura pública ante notario, indicando que el lienzo pertenecía a la Junta de Vecinos de Chijini, el lienzo volvió a aparecer “milagrosamente”, ya no se lo pudo trasladar a la parroquia Santísima Trinidad y el antiguo Santuario fue ampliado. Todo esto generó varios problemas y discusiones que duraron 5 años, con incluso la excomunión de algunos miembros de la Junta.
En la Actualidad el lienzo, además de poseer ahora un solo rostro y ya no tener las inscripciones en latín, (en forma de triángulo equilátero desde los extremos de las manos hasta el centro en medio de las piernas) (3), también está adornado con piedras preciosas, oro y plata. La parroquia Jesús del Gran Poder está fusionada a la de la Parroquia Santísima Trinidad, acabando de esta manera con las asperezas de las 2 parroquias. El santuario hoy en dia tiene la presencia de las hermanas Carmelitas de Santa Teresa y de los Agustinos.
La fiesta de la advocación varia cada año coincidiendo siempre con la de la Solemnidad de la Santísima Trinidad (Domingo después de Pentecostés). Antes de la fiesta los creyentes realizan una promesa afín de pedir favores al Señor Jesús del Gran Poder, con el compromiso de bailar y participar de la fiesta por 3 años. En la fiesta también conocida hoy como “la Fiesta Mayor de los Andes” participan 30.000 bailarines y 4.000 músicos.
Por la creciente separación del sentido religioso de la Imagen y la fiesta juntamente a la preocupación de la Iglesia por los muchos y grandes excesos a que lleva la celebración folklorista, los agentes pastorales de la parroquia Santísima Trinidad o Gran Poder Nuevo, y el Santuario Jesús del Gran Poder han elaborado un Documento con el cual desean motivar la reflexión y el dialogo entre todos los involucrados, interesados y devotos del Señor para que el festejo del Señor Jesús del Gran poder sea una expresión autentica, festiva y publica de la fe Cristiano-Católica.
por Edmundo Vicente Encinas Torrez
(1) En aquel entonces las postulantes al convento debían llevar consigo una imagen sacra al ingresar al convento.
(2) Un templo nuevo construido en la calle Max Paredes por que el Santuario quedaba muy pequeño para la cantidad de devotos del místico lienzo.
(3) En la imagen que se ve lo descrito antes: El centro de restauración del Ministerio de Cultura hizo una radiografía del lienzo, donde bajo una capa de pintura, se ve el rostro triple y como era la imagen originalmente antes de su repintado.