El trabajo desde casa permanente... debe esperar

Si la causa se extingue, la la razón también

Conforme la población de los países se va inmunizando y si el vacunarse es realmente efectivo contra el COVID y todas sus variantes, teóricamente, las personas tendrán que regresar a sus hábitos y costumbres normales, al menos aquellos preexistentes a la pandemia, siendo uno de los más destacados nuestras costumbres y formas de realizar el trabajo.

Furor digital

Al inicio de la pandemia, surgió un furor por la digitalización, no solo como modelo de negocio sino como forma de trabajo, allí tienen a Zoom que incrementó exponencialmente su valor desde mediados del año pasado, sin embargo, está eurforia se ha ido atenuando como las acciones de zoom, problemas como la soledad, la resistencia al cambio y algunas limitaciones de la tecnología, ponen en tela de juicio que el trabajo a distancia, se convierta en una realidad plena, sobre todo, en los sectores económicos no relacionados con las tecnologías de la información y más claramente en aquellos donde la presencia física es indispensable en alguno o varios de sus procesos clave, como el sector médico, la hostelería, el transporte, etc.. y que por lo mismo, hacen que la necesidad de una presencia física para todos los demás procesos sea también muy importante.

Ya en un artículo anterior abordamos las enormes áreas de aplicación que tienen las tecnologías de la información y cómo, efectivamente, permiten que gran parte de las actividades sea desarrollen más plena y eficientemente, sin embargo, por lo dicho en el párrafo anterior, muchas empresas deben ser precavidas a la hora de prescindir de sus instalaciones administrativas, realmente, para muchos puestos y funciones, por más que teóricamente puedan llevarse a cabo con el solo uso de a tecnología, se hace preciso estudiar mas los alcances y las implicaciones.

Antes-durante y después

La pandemia, más que imponer una nueva forma de trabajar, debe ser tomada, inicialmente, como un descubrimiento de áreas antes no exploradas, y que por lo tanto nos permita abrir nuestras perspectivas, empero, de allí a que migremos completamente, habría primero que hacer una evaluación pre-durante y post pandemia; esto es, ya tenemos los datos sobre como se trabajó antes y durante la pandemia, ahora habría que ver el desempeño después de la pandemia, sobre todo, porque gran parte de la economía, no se puede digitalizar y de alguna forma, también influirá en nuestras operaciones.