Embarazo y sol

Estar embarazada y tomar el sol. ¿son compatibles? ¿Debes extremar las precauciones?
Para empezar te diremos que tomar el sol, si lo haces con precaución, es beneficioso para tu salud, tanto física como mental. Así que por el hecho de estar embarazada no debes renunciar a exponer tu cuerpo al sol. 

Eso sí, hay que ser conscientes que durante el período que dura el embarazo, la pigmentación de la piel se ve afectada así que has de extremar las precauciones y seguir una serie de recomendaciones para tomar el sol:
Trata de no exponerte al sol durante las horas de máxima radiación. Es decir, entre las 12h del mediodía y hasta las 16h de la tarde es mejor no tomar el sol.
Te recomendamos también alternar espacios de tiempo al sol con espacios a la sombra. Intenta hacer pausas de la exposición al sol y refugiarte en la sombra. Como la piel está más sensible durante el embarazado, si permaneces muchas horas seguidas al sol pueden aparecer manchas. Así que lo mejor es estar un rato tomando el sol y luego descansar en la sombra.
Además es importante aplicar la protección solar 20 minutos antes de exponerse al sol, así conseguirás una protección total y segura, ya que la crema habrá sido absorbida por la piel.
Dar mucha importancia al protector solar que utilices. Asegúrate de que la crema solar que te apliques contenga productos aprobados y no contengan colorantes, parabenes u otros conservantes. La crema solar ha de ser segura para tu piel y para la del feto.

Si estás embarazada este verano puedes hacer vida normal ya que puedes ir a la playa o la piscina, tomar el sol y bañarte en el agua. Simplemente has de ser consciente de los riesgos que existen y tomar precauciones. Utiliza un protector solar de alta protección y disfruta del sol.