¿Emprender para salir de la pobreza?

Una cultura desafortunadamente exclusiva

La cultura del emprendimiento es una muy buena alternativa para incrementar los ingresos de las personas e incluso de que puedan desarrollar todas sus capacidad sin un límite establecido. Sin embargo, no es cierto que el emprender un negocio signifique una posibilidad real de incrementar sustancialmente los ingresos de todas las personas.

Los tipos de emprendimientos

Como hemos mencionado en otros artículos, existen básicamente dos tipos de emprendimientos, aquellos que introducen al mercado un producto que reduce estructuralmente los costos, y aquellos que ofrecen productos diferenciados, siendo la reducción de costos y la diferenciación sus respectivas ventajas. Ahora bien, los emprendimientos relacionados con productos que reducen costos son en su gran mayoría investigadores de áreas científico-tecnológicas que previamente han contado con ingentes presupuestos para su investigación, encontrándose la mayoría en universidades y centros de desarrollo científico, este tipo de emprendimientos, son de una naturaleza y contexto tan distintos de los relacionado con productos diferenciados que incluso es mejor tratarlos en otra categoría, y es que a diferencia de los emprendimientos diferenciados, además de venir de un contexto científico, requieren de enormes cantidades de inversión para su aplicación, como es el caso de las locomotoras, los barcos, la fibra óptica y la energía a base de hidrógeno; todos ellos han sido innovaciones tecnológicas que reducen o prometen reducir sustancialmente nuestros costos de transporte y comunicación.

Por otro lado, los emprendimientos basados en productos diferenciados son del acceso de la mayor parte de la población no vinculada a la investigación científica, por lo general no requieren de grandes inversiones previas y para su aplicación, siendo solo necesario que el emprendedor esté lo suficientemente formado de tal forma que tenga altos niveles de productividad, lograda a partir de la experiencia, los conocimientos y las virtudes. Sin embargo, todo negocio que ofrece productos diferenciados implica por lo general productos y servicios con un valor agregado, esto es una calidad premium superior a lo que actualmente hay, y como consecuencia tienen precios mayores; tal es el caso de una panadería de pasteles vieneses auténticos, una agencia de reclutamiento de altos directivos de la industria automotriz, etc..

Pastel premuim

Los mercados que pueden pagar por un producto o servicio diferenciado son solo aquellos que están en niveles socioeconómicos medio-alto, por lo que el emprendimento no es una buena alternativa para sectores económicos bajos debido a su falta de formación e ingreso disponible para pagar productos con un valor agregado.

Conclusiones

México esta muy lejos de las inversiones requeridas en infraestructura de transportes y comunicaciones, sobretodo, indispensables para que los estratos económicos bajos tengan más dinero disponible de tal forma que incremente su consumo y con ello la riqueza nacional; por lo restringido de su presupuesto, los mercados de clase económica baja no tienen posibilidad de comprar productos diferenciados dando como consecuencia que tampoco tengan como alternativa el emprendimiento para incrementar sus ingresos. Por otro lado, personas de segmentos medio-altos con alta experiencia y productividad pueden ofrecer productos diferenciados en calidad, y así incrementar sustancialmente sus ingresos con respecto a un puesto de trabajo.