El insólito y cruel caso del trabajador despedido de una fábrica de pastas por donar fideos y ravioles a comedores comunitarios. El conmovedor mensaje completo y textual de Osvaldo publicado hace pocas horas es el siguiente:
Me Despidieron...Osvaldo Gerardo Scavone
Son las 5 de la mañana, tomando mate, tratando de entender ¿ por que me despidieron ? Ayer llegue a la empresa donde trabajo hace 6 años, Villa D'agri ,me cambie fui al comedor a tomar un café antes de comenzar la jornada, se me acerca un compañero de vigilancia y me comunica que no entre , que el señor Alejandro García de RRHH dice que no puedo entrar. No entendía nada.
Recorrí en mi cabeza toda la jornada anterior pero no encontre nada que podria justificar una sanción, nada, trabaje mis ocho horas a pleno como siempre.
La empresa es una industria de pasta que fabrica marca propia y para marcas importantes del mercado.
Como por convenio nos dan 2 kg. de pastas por semana.
Ante la situación que vive el país comencé a juntar esos ravioles para llevar a comedores comunitarios con la buena colaboración de compañeros que se solidarizan me daban lo que podían, a veces no juntaba los 20 kg. que los llevaba cada 15 días, había semanas que no alcanzaba a juntar lo suficiente y compraba lo que me faltaba en Día, carrefour o coto , para completar los 20 kg.
El primer comedor fue el lucerito del barrio el Lucero de Madero y el actual es Rayito de luz de Ciudad Evita un comedor que necesita mucha ayuda.
Bueno llego el Sr. García RRHH y me comunica que por esas donaciones la empresa me despide. Porque el comedor publicó la donación y se alcanza a ver la marca carrefour, etc. que seguro compre algunos.
Seguro voy a implementar los medios que pueda , para que Carrefour , Dia, y coto donde en este ultimo compre la marca D' agri . Para preguntarles porque hacen despedir a una persona de 62 años que compra sus productos para donar a un comedor comunitario , donde muchos chicos a veces obtienen su única comida caliente del día.
Estuve una hora en la puerta de la fábrica tratando de calmar mi angustia porque no podía manejar la moto en ese estado , cuando me sentí mejor fui a darle la novedad a Stella mi esposa lo mas entero posible pero cuando vi llenarse los ojos de lágrima de mi señora yo tambien me quebre.
No me arrepiento de haber tratado de ayudar con un granito de arena a compatriotas que la están pasando mal ante un gobierno insensible y en mi caso empresas insensibles.
Agradezco a mis compañeros por ser solidarios, haber colaborado y a los que colaboran cocinando con muchas dificultades en el comedor Rayito de Luz.