Lo cierto es que tras épocas de empacho, como en las Fiestas Navideñas, no hay nada mejor que recurrir a las ensaladas y las verduras para retornar a la normalidad.
En este caso he añadido un queso italiano ahumado que tenía en la nevera, pero podéis prescindir de él si la queréis aún más ligera o añadir otro de vuestro agrado.
Las frambuesas le dan un toque ácido a la ensalada que resulta muy agradable y así utilizo los restos de estas frutas rojas que compré para un postre navideño.
También aproveché para abrir este delicioso vinagre a la fruta de la pasión que me trajo mi hijo Nacho de regalo parisino.
Para 2 personas:
- 1 bolsa de mezclum de lechugas
- 100 g de tomatitos cherry variados
- 1/2 pechuga de pollo troceada
- 150 g de queso scamorza ahumado
- 1 puñado de nueces
- 1 puñado de frambuesas
- aceite de oliva virgen extra
- vinagre
- sal
- semillas de amapola (opcional)
Se corta la pechuga en tiras y se saltean en una sartén o plancha con una pizca de aceite hasta que estén doraditas.
Se dispone la lechuga cortada y lavada junto con los tomatitos en un plato o ensaladera para cada ración.
Se coloca el pollo por encima, las nueces, el queso cortado fino en triángulos y las frambuesas.
Se prepara una vinagreta con 3 cucharadas de aceite y 1 cucharada de vinagre y la sal y se emulsiona batiendo un poco el aderezo.
Se añade la vinagreta y las semillas de amapola y se come de inmediato, recién aliñada.