Es complicado en ocasiones poner nombre a las recetas.
Si solo hay un protagonista no hay problema pero en un plato en que son varios los sabores a destacar, la cosa se complica.
De ahí el nombre tan descriptivo de esta ensalada.
La combinación de la naranja con la rúcula y de estas con el rábano es de sabores y de texturas.
El punto diferenciador es el emplear la canela en una vinagreta y potenciar el sabor de la naranja con el agua de azahar.
Os dejo pues con esa sencilla pero a la vez gran ensalada.

Ingredientes para 3-4 personas:
Aceitunas negras de Aragón
Aceite de oliva virgen extra
Cortar la cebolleta en aros y ponerlos en agua fría unos 10 minutos.
Cortar la naranja a lo vivo, cada gajo cortarlo en 3-4 trozos.
Mientras preparar la vinagreta, rallar un poco de la piel de la naranja en un cuenco, añadir el zumo de esa naranja, sal, pimenta, el agua de azahar, la canela y aproximadamente la misma cantidad de aceite que de zumo, batir bien y reservar.
En una fuente de servir colocar la rúcula, los rábanos lavados y cortados a rodajas, las aceitunas negras, las nueces troceadas y los trozos de naranja.
Aliñar con la vinagreta.
Las cantidades son orientativas.
** Es una ensalada que no debe ser abundante la ración.
** En la vinagreta el toque final lo tenéis que dar vosotros a vuestro gusto en lo que a sal , pimienta y aceite se refiere.
** Cortar la naranja a lo vivo es desprenderla de todas si¡us pieles, la anaranjada exterior y la blanca interior, dejando también el gajo libre de telillas. (aquí)
** Las naranjas empleadas son de NaranjasLu , con dos será suficiente ya que suelen ser muy grandes y dulces
** c/c = cuchara de las de café
Celíacos: aseguraros bien de que todos los ingredientes sean sin gluten.
