¡Hola! ¿Cómo están? ¡Tanto tiempo sin vernos! 😊😊 ¡Qué alegría tenerlos en mi cocina nuevamente! 😉😉 Aquí estamos, empezando la sexta temporada del blog, después de un parate - tan necesario como merecido - para descansar, tomar nuevas fuerzas, recuperarme de un año con muchas cosas, encarar nuevos proyectos con renovadas energías y experimentar con más recetas para presentarles.
Hace ya 6 años, comencé con este espacio que me permite abrir las puertas de mi cocina semanalmente para ofrecerles mis recetas (algunas heredadas; tantas otras, de mi entera creación y algunas más, reversionadas de clásicos familiares o de mis amigos), buscando incluir productos de estación e ingredientes sanos que, a veces, no resultan tan conocidos o que, aunque los conozcan, puede que no sepan bien qué hacer con ellos. Como sin su compañía este rinconcito de cocina no tendría mucha razón de ser, aprovecho para agradecerles inmensamente que estén allí, porque sus comentarios y consultas son el corazón de este blog. ¡GRACIAS ENORMES! 😘😘😘
Antes de ir directamente a la receta de esta semana, les comparto algunos de los paisajes que llenaron mis ojos y mi corazón durante las vacaciones. A propósito de esto, les confieso (de nuevo) que cada vez me cuesta más regresar del sur 😢😢 Montañas, bosques, lagos, arroyos, ríos, glaciares y volcanes conforman la geografía que más me atrae y me hace sentir en armonía conmigo y el universo...💗💗💗
Por si al ver las fotos les entra ganas de saber más sobre estos lugares, les cuento de qué se trata: Bahía Mansa, Villa La Angostura (provincia de Neuquén); Lago Hermoso, Ruta de los Siete Lagos (Neuquén); Bahía López, San Carlos de Bariloche (provincia de Río Negro); Lago Meliquina, Villa Lago Meliquina (Neuquén), Parque Municipal Llao Llao, San Carlos de Bariloche (Río Negro) y Las Pendientes, Cerro Chapelco, San Martín de los Andes (Neuquén) 😍😍😍
Ya les iré contando sobre los nuevos descubrimientos gastronómicos que realicé en este viaje, para que compartamos algunas propuestas culinarias, basadas en ellos y los productos que traje de allí. Pero, ahora nos vamos derechito a la receta que les traigo hoy para no perder más tiempo. En esta ocasión, como para ir arrancando de nuevo, quitándonos la pereza o la falta de costumbre, les propongo una ensalada que lo que tiene de simple lo tiene de tentadora 😉😊
Este plato posee todo lo que se necesita para ser un éxito: Ingredientes que fácilmente encontramos por aquí, en esta época del año, en mercados de orgánicos, verdulerías y comercios gourmet; sabores genuinos que se presentan sin muchas vueltas para que podamos reconocerlos de inmediato, rapidez en la preparación y distintas texturas que le dan un juego interesante al plato. ¿Complicaciones? Ninguna. ¿Sabor? A montones. ¿Texturas? Variadas y súper frescas 😍😋
Sin especificar las cantidades de cada ingrediente, que dependerán directamente del número de comensales que se sienten a la mesa, les propongo que comencemos cortando los vegetales en láminas finas. Hinojos tiernos (conseguí unos baby orgánicos que, al cortarlos, inundaron la casa con aromas a anís fresco y penetrante; tanto, que tuve que contenerme para no comerlos todos antes de armar la ensalada. No sé a ustedes, pero me encanta comer el hinojo así, sin más que limpiarlo 😍), zanahorias que rallamos grueso para que no pierdan sus jugos y podamos reconocerlas a simple vista, rabanitos pequeños con mucho sabor picantón y terroso, y tomates cherry que partimos en mitades (o cuartos si no son muy pequeños). Entretanto, cocemos los huevos duros y cortamos a la mitad los bocconcini, previamente escurridos muy bien para quitarles el suero en el que se conservan.
Aparte, picamos groseramente un buen puñado de almendras, semillas de girasol y de calabaza. Luego, las disponemos en una sartén caliente y las tostamos hasta que se doren y suelten sus aromas. Entonces, las reservamos para que se enfríen hasta el momento de servir.
Por último, preparamos la limoneta de cilantro que servirá de aliño para nuestra ensalada. En el vaso de la procesadora/mixer/robot de cocina colocamos 3 partes de aceite, 1 parte de jugo de limón recién exprimido, un puñado de hojas limpias de cilantro/perejil chino, sal, pimienta y nuez moscada a gusto. Procesamos hasta obtener una emulsión suave y homogénea.
Llega el momento de servir y, para ello, disponemos los vegetales cortados en un bol, acomodamos por encima los huevos duros y los bocconcini, y condimentamos con la limoneta que preparamos. Finalmente, decoramos con las semillas y almendras tostadas y llevamos a la mesa para disfrutar 😋
Algunas observaciones y recomendaciones finales: Por si no los conocen, los bocconcini son originarios de Nápoles, Italia. Se trata de pequeños quesos mozzarella del tamaño de un tomate cherry o un huevo, originalmente preparados con leche de búfala, aunque son muy difundidos los que se realizan a partir de la mezcla de leche de vaca y búfala o sólo con leche de vaca. En caso que no los encuentren con facilidad en comercios o mercados, pueden reemplazarse por cubitos de queso mozzarella, queso fresco o quesos semiduros (Gouda, Gruyére, Emmental, Fontina, Pategrás...).
Los vegetales que elegí para la ocasión combinan perfectamente entre sí; sin embargo, pueden escoger los que sean de su preferencia. De igual modo, pueden optar por otro mix de frutos secos y semillas para incorporar texturas crocantes a la ensalada (avellanas, nueces, semillas de sésamo, chía, lino...).
Entretanto, como la relación con el cilantro/perejil chino es una cuestión de blancos y negros (o se lo ama o se lo odia, sin muchas vueltas), si no les resulta agradable al paladar pueden sustituirlo por el perejil clásico o por el crespo/rizado.En caso que el aliño lo preparen con bastante anticipación, en el momento de servirlo será necesario que lo batan ligeramente porque las emulsiones en reposo se separan naturalmente por la incompatibilidad de sus componentes. Al batirlo corta y rápidamente, lograremos que retome su textura sedosa y homogénea.
Antes de despedirme, les agradezco que me hayan acompañado hasta aquí y les recuerdo, por si no lo han notado todavía, que he diseñado un logo para el blog (Ya era hora, ¿verdad?); después me cuentan qué les ha parecido, al igual que la propuesta que les traje hoy 😉😃
Nos reencontramos la semana próxima con una nueva receta. Hasta entonces, les deseo que disfruten mucho junto a sus seres queridos y que no se olviden de experimentar en la cocina, que siempre sale algo bueno de allí 😘😘😘
Textos y fotografías: ©Bouquet Garni Recetas - Silvina L. Fernández Di LisioDigiscrap: ©Designs by Connie Prince/Aimee Harrison Designs/BCD Designs/Bouquet Garni Recetas