La familia Emilio Moro apuesta fuerte. Y lo hace con una propuesta moderna e innovadora, con 50 hectáreas de viñedos propios rodeando un edificio integrado y vanguardista, diseñado no solo para producir uno de los mejores vinos de la Ribera del Duero, sino también para ofrecer una oferta enorurística de calidad. Desde los talleres de vendimia, hasta los tours enoturísticos, todas la experiencias que nos proponen tienen el inconfundible sello de la excelencia turística. Pensadas para todos los gustos, para todos los bolsillos y con horarios muy extensos. Hablamos con una de las responsables del diseño de estas experiencias, Alicia Herrero, del departamento de enoturismo y comunicación de la bodega.
¿Desde cuando recibís visitas en la bodega?
Bodegas Cepa 21 se diseñó desde su proyecto con una apuesta firme por el enoturismo, por lo que recibimos visitas desde que abrimos nuestras puertas. El moderno edificio se integra perfectamente con los viñedos que lo rodean, lo que permite a los visitantes conocer de cerca el proceso de elaboración de nuestros vinos, desde su comienzo en la viña hasta la botella, así como disfrutar de iniciativas enoturísticas innovadoras como talleres de vendimia o talleres de poda en verde. El restaurante y la terraza se concibieron para ofrecer una experiencia enoturística completa, que deja a los visitantes con ganas de más Cepa 21 y más Ribera.
¿Qué distintos tipos de visitantes tenéis?
Nuestro cliente tipo es un turista joven, principalmente con edades comprendidas entre los 30 y 50 años, en un 90% de nacionalidad española, destacando su origen de Madrid, Valladolid y Alicante, y con un perfil de grupo de amigos o parejas. Sin embargo, durante los últimos años comenzamos a ver otro tipo de turistas, como familias con niños, que se apuntan a las actividades más dinámicas, y extranjeros en busca de conocer más acerca de la Ribera.
Durante el último año, ¿habéis visto incrementar el número de visitantes?
Se contabiliza desde enero a agosto un crecimiento en el número de visitantes del 30%. Estamos desarrollando nuevas actividades y talleres que atraigan nuevos turistas orientando la promoción a iniciativas culturales ligadas al mundo del vino. Algunos ejemplos son la iniciativa “La ejecución del Empecinado”, desarrollada el 20 de agosto, o el espectáculo “La danza del Vino” desarrollada el 30 de septiembre.
Además de las visitas, ¿ofrecéis algún otro tipo de servicio turístico, como cursos de cata, eventos, conciertos, talleres…?
En Cepa 21 buscamos innovar, no solo en la manera de hacer nuestros vinos y cuidar nuestros viñedos, sino también en las experiencias enoturísticas y la manera en que hacemos el vino más accesible. Además de los tours que ofrecemos que incluyen visita con cata, nos esforzamos para que el turista se sienta parte de nosotros y conozca todos los secretos de la elaboración del vino a través de distintos talleres. Actualmente, y hasta el 15 de octubre, estamos desarrollando nuestro “Taller de Vendimia”, en el que pueden participar familias y personas de todas las edades y que permite a los turistas conocer de cerca todo el proceso del vino. El turista pisa el viñedo, vendimia las cepas, comprueba la maduración de la uva con instrumentos técnicos de medida, la pisa para extraer el mosto, visita la bodega y degusta un vino terminado. Todas las semanas ofrecemos Talleres de inglés, enseñando al turista los términos más representativos del mundo enológico en inglés de una manera amena y dinámica, mientras conocen las instalaciones y disfrutan de los paisajes. La iniciativa finaliza con una cata didáctica en inglés. Otro taller que gana adeptos es el Taller de Poda en verde, en el cual los turistas aprenden a seleccionar los mejores brotes de la cepa, visitan la bodega y degustan un vino. En los últimos meses también estamos lanzando otras iniciativas como visitas teatralizadas, recorridos amenizados con baile… Además, organizamos eventos para empresas, actividades en fechas especiales y otros servicios.
¿Tenéis algún producto o plan especial para familias con niños?
Nuestro equipo de profesionales adapta las explicaciones sobre los procesos de vendimia y de bodega al tipo de público que nos visita. Una de las actividades que más disfrutan los niños es la que estamos desarrollando durante estos días, el taller vendimia, pues es muy participativa, pisan la uva y además degustan el mosto. Además, en la actualidad nos encontramos desarrollando actividades alternativas para los más pequeños, de manera que los padres pueden disfrutar de la visita más tranquilamente.
¿Tenéis previsto ampliar vuestra oferta en cuanto a enoturismo? ¿En qué sentido?
El objetivo del departamento de enoturismo es transmitir a todas las personas que nos visitan nuestra pasión por el vino y el proceso de vinificación. Por ello, siempre estamos pensando en qué servicios, experiencias y tours podemos ofrecer para lograrlo. Cada año estudiamos y elaboramos el plan estratégico de enoturismo donde se proyectan las nuevas iniciativas que se irán desarrollando a lo largo del año. Con todo esto se busca potenciar un enoturismo cultural ligado al estilo innovador de la bodega. Una fuente de información de la que nos valemos en Cepa 21, es solicitar a los visitantes sus sugerencias y comentarios para comprender mejor que experiencias les gustaría disfrutar en nuestra bodega.
¿Estáis integrados en la Ruta del Vino? En caso afirmativo, ¿en qué consiste vuestra colaboración?
Estamos adheridos a la Ruta del Vino Ribera del Duero desde el año 2012. Lo consideramos un organismo de promoción muy importante, que nos permite dar mayor difusión a nuestras iniciativas, atrayendo así a más gente a nuestra bodega. El objetivo de Bodegas Emilio Moro al formar parte de la Ruta del Vino Ribera del Duero es crear un producto enoturístico competitivo, rentable, sostenible y diferenciado.
¿Vendéis productos propios en la bodega? ¿Qué es lo que más se vende? ¿Se incrementan las ventas cada año?
La bodega cuenta con sala de ventas en donde se pueden adquirir todas nuestras marcas en sus diferentes formatos; 0,75, magnum, etc. Las ventas se incrementan en función de los vinos que se degustan durante las visitas. Además, existe una exposición de las acciones desarrolladas para la Fundación Emilio Moro, como la venta joyas con la temática de la viña, el tarjetón regalo del proyecto “Apadrina tu Cepa” o la venta de nuestro vino solidario “Clon de la Familia”, cuya recaudación se destina al 100% a la Fundación Emilio Moro.
¿Tenéis muchos visitantes extranjeros?
La mayoría de los visitantes de Cepa 21 son españoles, pero durante los últimos años, y gracias a nuestros esfuerzos de comunicación y enoturismo y a iniciativas como los tours bilingües, notamos que cada vez recibimos más visitantes extranjeros, sobre todo países como Francia, Inglaterra y Estados Unidos. El número de visitantes extranjeros y su procedencia está relacionado con el trabajo del equipo comercial de exportación. Además se registra un incremento notable del turista extranjero en nuestra ruta del vino, especialmente en los meses de verano y vendimias. Ser reconocido en el 2016 la Ruta del Vino de España más visitada es una gran publicidad para todo tipo de mercados.
Los turistas que os visitan, sean nacionales o extranjeros, ¿suelen repetir?
La fidelidad por nuestra bodega es algo que percibimos en un grado muy alto, no sólo porque los visitantes vuelven para comprar vino, sino también porque quieren realizar otras actividades diferentes a las que ya han disfrutado (por ejemplo, turistas que hacen la visita con cata repiten otro día con el Taller de Vendimia). Esto nos motiva para crear y proponer nuevas iniciativas y experiencias que sigan haciendo disfrutar a los visitantes.
¿Qué opinas sobre el enoturismo y su futuro?
El enoturismo, y más concretamente el enoturismo en la Ribera del Duero, está en pleno auge. Según una encuesta realizada por el Observatorio Turístico de las Rutas del Vino de España, la Ruta del Vino Ribera del Duero, a la que está adherida Bodegas Cepa 21, es la más visitada dentro de las 25 Rutas del Vino certificadas que existen en España. Por otra parte, cada vez más extranjeros se acercan a nuestra región para conocer la calidad de los vinos, pues los medios internacionales comienzan a hacerse eco de la excelente relación calidad-precio de los vinos de esta D.O. Esto se traduce en oportunidad, no sólo para que las bodegas ofrezcan la calidad de sus vinos, sino para el desarrollo toda la región. Con trabajo, esfuerzo e innovación, seguiremos atrayendo turistas y les ofreceremos nuevas experiencias y calidad en le servicio, que seguirá contribuyendo al crecimiento del sector enoturístico de la Ribera del Duero.
Ideas claras, desde la perspectiva de la calidad turística y la oferta de experiencias únicas e inolvidables que no te dejan indiferente. Si quieres vivir la Ribera del Duero en profundidad, no lo dudes, Cepa 21 es, hoy por hoy, una de las mejores opciones para los amantes del vino y los viajes.