Entrevistando Mundos: Julia Pons Montoro

Sus palabras tiernas y mágicas han conquistado ya muchos corazones. El mundo que ha creado ha conseguido que muchos, de nuevo, creen en aquellos sueños fantásticos que tenían de pequeños. Los personajes a los cuales le ha dado vida han enternecido a muchos.
Un cuento que os hará libraros de vuestras preocupaciones y con el que conseguiréis sentiros, mientras los leéis, libres.
Una profecía que os encantara.
Un mundo que deseareis visitar.
Bienvenidos al Otro Lado.
¿Quereís saber más sobre los inicios de Memorias del Otro Lado y de su autora? Pues estoy segura que esta entrevista os encantara.  1.¿Como surgió la idea de escribir una serie de libros semejantes a un cuento y todos los
mágicos personajes y lugares que podemos encontrar en ellos?
Féyzlim nació una noche de verano de 2005. El primer impulso fue escribir un cuento de
fantasía en siete capítulos. Aquella noche nacieron el Mar de Chimeneas y el país de Todoal-
revés. Completé el cuento en pocos días y el relato gustó a mis conocidos. El final de la
historia dejaba una invitación, los personajes partían en busca de nuevas aventuras, y yo
quería seguir explorando el Otro Lado más a fondo.
A lo largo de 2005 y 2006 fui desarrollando el resto de la historia. Lo que, en principio, iba a
seguir el mismo esquema de “cuento en siete capítulos” y convertirse en la segunda parte
(“En la colina de Brys-Néil”), acabó extendiéndose hasta el punto de alcanzar treinta y cinco
capítulos o más. Acabada la historia, tenía en mis manos una novela de fantasía bastante
extensa, a la que “Féyzlim en el País de las Quimeras” servía de relato introductorio.
Registré el libro y traté de contactar sin éxito con editoriales. A lo largo de los años
siguientes la historia fue sufriendo modificaciones, si bien la trama central, a grandes rasgos,
se mantuvo siempre fiel a su esencia. Finalmente, opté por dividir la novela en seis relatos
de siete capítulos cada uno, siguiendo el esquema del primer cuento. Lo hice porque quería
darle una estructura más ordenada que hiciera la lectura más agradable y amena. La novela
era vasta y muchas veces incluía aventuras menores dentro de la trama principal, por lo que
se adaptó fácilmente a la nueva estructura. Así fue como comencé a autopublicarla el pasado
marzo de 2014.
2. De todos tus personajes, ¿con cuál te identificas más?
No podría elegir uno. Cada uno de mis personajes, aun cuando sean opuestos entre sí, tiene
algo mío. Supongo que le sucede a todo escritor. De Féyzlim me gusta su fuerza de
voluntad, que no se rinde ante nada: si su estado de ánimo flaquea, siempre logra animarse
de nuevo a sí misma y seguir adelante; de Éylian, su independencia y rebeldía, pues nunca
se conforma con lo primero que le digan sino que tiene que experimentar por sí mismo las
cosas. De otros personajes que compartirán protagonismo con ellos aún no puedo hablar, ya
que no aparecen todavía en los dos primeras entregas de la saga.
3. ¿Cuántos años llevas escribiendo?
Desde que tengo recuerdo, siempre tuve la cabeza en las nubes e inventaba fantasías sin
parar, si bien escribí mi primer relato algo más extenso con diez años. Se llamaba “Aventura
en Elfland” y aún lo conservo. Más tarde, con once años, gané el primer premio de un
concurso infantil que realizaba la biblioteca de mi ciudad (por entonces vivía en Motril). Allí
guardan en el archivo otro de mis primeros relatos, “La primera aventura del club Ápeca”.
Desde entonces no paré de escribir historias, aunque algunas se perdieron por el camino. En
mis años de instituto fui desarrollando muchos conceptos, lugares y personajes que
acabarían formando parte de “Memorias del Otro Lado”.
4. ¿Qué crees que es lo más importante para crear un cuento tan mágico como el tuyo?
No sé si lo más importante, pero creo que es esencial que el escritor disfrute de la historia
que está creando. Si el escritor lo pasa bien, si ama a sus personajes, entonces cabe la
posibilidad de que la historia guste a otras personas afines y que se enamoren de esos
personajes tanto como su creador.
También es importante tener una buena memoria personal, recordar la visión del mundo que
teníamos de niños, cuando todo era nuevo, mágico y emocionante. Es necesaria esa mirada
inocente y ayuda mucho guardar los relatos que uno escribió de niño, porque están repletos
de ideas frescas. Cuando era pequeña vino a mi colegio la escritora Cristina Alemparte.
Habíamos leído su libro “Lumbánico, el planeta cúbico”, que me encantó. No olvidaré lo
que nos dijo en la conferencia, justamente eso, que guardáramos todo lo que escribiéramos
de niños porque luego nos sería de gran ayuda. Aquel fue un día especial, incluso le regalé
una copia de mi propio cuento, e hice caso de su consejo.¿Un último punto? Prestar atención a lo que se sueña tanto por las noches como despiertos
en la parada del autobús o en el baño, y tener siempre a mano un papel donde apuntar esas
ensoñaciones antes de que la vida diaria las borre de nuestra memoria.
Y, por supuesto, leer mucho, cuanto más, mejor.
5. Como escritora, ¿qué es lo imprescindible para poder acabar un libro?
La planificación. Sin un esquema o índice que nos guíe por el esqueleto del libro, corremos
el peligro de perdernos a la mitad, aburrirnos o bloquearnos y no llegar a la meta final. Los
comienzos de una historia son fáciles, los finales no tanto, por eso es importante decidir
desde el principio cómo acabará la historia. El esquema que hagamos ha de ser flexible,
abierto a modificaciones, pues los personajes a veces actúan por sí mismos, tomando
autonomía propia y alejándose de los caminos que les había marcado el autor. Pero esto
sucede posteriormente, al empezar debe parecer que tenemos claro todo el camino,
necesitamos construirnos una brújula que no nos deje tirados en medio del País de las
Quimeras, sin saber hacia donde continuar.
6. ¿Algunas palabras para tus próximos lectores?
Les pediría que tengan un espíritu abierto, que no tilden de infantil toda historia repleta de
magia pues la fantasía nace de la realidad, no puede ser de otra manera. La fantasía sólo es
una forma diferente de mirar lo cotidiano, tal vez más divertida y no menos válida. En
nuestro mundo real también nos han robado la sombra a más de uno, nos hemos perdido
entre un Mar de Chimeneas sin saber por cuál decidirnos y hemos afrontado miedos que,
más tarde, han resultado ser gratas sorpresas.
Envío un abrazo enorme a todos los que puedan llegar a leer mis historias porque me hace
inmensamente feliz compartirlas con vosotros y que podáis ver los lugares que ya visité, los
personajes que amé y las vivencias que me contaron. Porque ninguna historia debe morir y,
para estar viva, necesita ser leída, avivada por un millón de mentes diferentes, cada una con
su propia y particular imaginación. Son los lectores los que ponen la guinda del pastel, los
que completan la obra, pues, sin ellos, sin la magia que otorgan a las palabras, cada libro no
sería más que un trozo de papel. Mi inmenso agradecimiento a ellos, que darán vida y forma
al Otro Lado. Espero que disfruten del viaje.
Mucha más información en:Facebook: La cara del Otro LadoTwitter: @JuliaPonsMontorBlog:Memorias del Otro LadoReseña Memorias del Otro Lado 1: ¡Aquí!Reseña Memorias del Otro Lado 2: ¡Aquí!Amazon: Compras mágicas Youtube: El canal más mágico de Youtube
¡Nos leemos devoradores!