¿Es malo masturbarse?

En el mundo de la sexualidad, la masturbación siempre ha supuesto para muchos un sinónimo de tabú. De esta forma, ha llegado a convertirse en un tema del que parece mejor no hablar o que hay que mantener en la más estricta privacidad, dotándolo en ocasiones de unas connotaciones negativas e incluso estigmatizantes.

Sin embargo, la realidad es que se trata de una parte más de nuestra existencia, una forma de vivir nuestra sexualidad y de aprender a relacionarnos con nuestro propio cuerpo que no ha de tener consecuencias perjudiciales para nosotros siempre que no se convierta en una obsesión, lo mismo que ocurre con cualquier otra conducta.

Pero el caso es que la sociedad muchas veces nos anima a mantener este hecho en el más profundo de los escondites, haciendo que haya gente que de verdad llegue a pensar que está haciendo algo malo. Esta sensación de culpa, la cual por sus características y por la presión social ha acompañado siempre más a la mujer, tiene mucha relación con otros aspectos vitales en los que tampoco parecemos permitirnos disfrutar, como si de algún modo existiera un miedo a hacerlo.

Y lo malo es que este tema, lejos de carecer de importancia, tiene mucha más influencia en nuestras futuras relaciones y formas de vivir la afectividad de lo que imaginamos. Es el caso de las personas que han vivido la masturbación con la creencia de que se trata de un acto pecador, gracias a una educación y una cultura muy rígidas, y que luego acaban en el psicólogo por la aparición de todo tipo de disfunciones sexuales.

Por todo esto, y aunque hoy en día siga habiendo muchos lugares en los que se “previene” acerca de caer en las garras de este supuesto “acto prohibido”, lo cierto es que masturbarse no es en absoluto algo negativo, más bien todo lo contrario. Durante el orgasmo, en nuestro cuerpo se produce la liberación de endorfinas, algo nos hace sentir mejor y nos ayuda a aliviar tensiones. Además, aparte de las comentadas disfunciones sexuales (vaginismo, problemas de erección, eyaculación precoz…) recientemente se ha demostrado que masturbarse con frecuencia puede ayudar a prevenir el cáncer de próstata en hombres y otros tumores en la mujer.

En resumidas cuentas, la masturbación es algo que hay que vivir con la más completa naturalidad, sabiendo que no es algo de lo que debas avergonzarte o que esté sumido en el pecado. Muchos animales lo hacen, y constituye una excelente forma de canalizar nuestra energía y nuestros naturales impulsos sexuales.

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