Cuando en Madrid no llueve durante varios dias se pone una "boina" encima de la ciudad. Lo mismo ocurre en China, pero con todo el pais
He pasado revista a varios estudios y todos están de acuerdo en que el aire de las ciudades chinas es un asquito. Una lista que el Banco Mundial elaboró en 2004 colocaba a 12 ciudades chinas entre las 18 con más contaminación por partículas (Tianjin, Chongqin, Shenyang, Zhengzhou, Jinan, Lanzhou, Taiyuan, Pekín, Chengdu, Ahmadabad, Anshan y Wuhan). En 2007 The Blacksmith Institute publicó la lista de los lugares más contaminados del mundo. La lista no sólo tenía en cuenta la calidad del aire, sino también cuestiones tales como la potabilidad del agua o la presencia de metales pesados. Entre los 30 lugares donde no querrías vivir si te preocupa tu salud, hay 6 que están en China (Wanshan, Tianjin, Huaxi, Lanzhou, Linfen y Urumqi). Sólo hay otro país que también tiene 6 países en la lista, Rusia. Sí, los sistemas comunistas nunca se preocuparon demasiado por el medio ambiente. Una lista de 2010, cuya fuente última no he conseguido encontrar, aunque creo que es de NNUU, coloca a(Linfen, Yangquan, Datong, Shizuishan, Xianyang, Luoyang, Changsha). En esta lista Rusia también queda en un honroso segundo lugar por detrás de China. Todas estas listas concuerdan en que las ciudades chinas son un asquito, aunque haya discrepancias sobre cuáles son las más asquito de todas. Puede que las discrepancias se deban a que no todas las listas se basan en los mismos parámetros.
Deben de pensar que montar en bicicleta endurece los musculos. Cierto, pero si supieran como se les estan quedando los pulmones...
El 28 de julio del año pasado el “The New York Times” publicó un artículo bastante impactante titulado “En China, la polución empeora a pesar de los nuevos esfuerzos”, que es como decir “la superficie del sol se calienta a pesar de las manchas solares”. El artículo incluía algunos datos impactantes: la concentración de partículas en el aire de Pekin superó los estándares de la OMS el 80% de los días en 2008, más del 25% del agua de los ríos y lagos de China no es potable de contaminada que está, la lluvia ácida se ha convertido en un problema para 200 de las 440 ciudades que se estudiaron.
Al que esta noticia le parezca alarmante, que se lea la noticia que publicó el 8 de noviembre de 2010 la agencia china de noticias Xinhua: “Los niveles de contaminación en las ciudades chinas están mejorando: un estudio.” También esta noticia incluía datos impactantes: el 66’7% de los días en 655 ciudades estudiadas arrojaron el año anterior niveles aceptables o buenos de calidad del aire (maravilloso, sus habitantes sólo respiraron mierda un 33,3% de los días) y la calidad del agua subterránea urbana arrojó estándares aceptables en el 89,84% de los análisis (+4’44% que el año anterior). La noticia reconoce que en 14 ciudades los niveles de contaminación dejan mucho que desear.
Me parece que aquí alguien miente o exagera, pero me merecen tan poca credibilidad tanto el “The New York Times” como la agencia de noticias Xinhua, que no sé con cuál quedarme.
Creo que voy a quedarme con el “The New York Times” por varios motivos. El primero es que un estudio que hicieron el Instituto de Asuntos Públicos y Medioambientales de Pekín y el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales de EEUU a finales de 2010 reveló que las ciudades en general se negaban a hacer públicos los datos sobre contaminación, aunque se habían vuelto algo más transparentes en los últimos dos años. El segundo es que en noviembre pasado Shangai arrojó los peores datos en calidad del aire de los últimos 5 años y Pekín batió su record de partículas en suspensión: 500 micrones por metro cúbico (en la UE el límite considerado aceptable son 20 micrones). No es el tipo de record que uno bate cuando la contaminación está descendiendo.
Los optimistas apuntan a que el desarrollo económico lleva en su primer momento a una degradación del medio ambiente, pero hay un punto de ruptura, a partir del cual el medio ambiente adquiere más importancia y se produce el fenómeno inverso: más desarrollo económico mejora el medio ambiente, ya sea mediante mejoras tecnológicas, mediante cambios legislativos o mediante una mayor preocupación social, que impulse los otros dos factores. Esta es la hipótesis que subyace a la curva medioambiental de Kuznets. Desgraciadamente, todo en economía viene con un precio. Algunos estudios económicos parecen mostrar que esa curva se cumple, pero a condición de que aumenten las desigualdades sociales. Me imagino que es lo último que querrían oír los chinos, que el precio de un medio ambiente más limpio sea una mayor desigualdad social.