Revista Salud y Bienestar
Foto de la presentación del estudio con Joan Carles March, Rosa Pérez y Elena Escala entre otros.
Las redes sociales y el universo que internet supone para todo, y para la salud en particular, es una realidad que se expande de manera constante. Se han hechos intentos de medir y cuantificar pero al ser un sistema complejo, multivariante y en constante movimiento no es sencillo hacerse una idea exacta.
Hace pocos días se ha hecho público el Informe Top ten salud 2.0 2012-1013 que un laboratorio farmacéutico encargó a la agencia de comunicación Planner Media. Dicho estudio trata de hacer una fotografía panorámica que desarrolla en 60 páginas con apoyo de gráficos. En él se formulan las siguientes preguntas : ¿quiénes hablan y con quién? ¿cómo se está interactuando? ¿para quién se habla? ¿de qué? ¿con qué objetivo?
Los principales hallazgos son:
▪Los agentes del sector sanitario hacen un uso dispar de las redes sociales. Los profesionales sanitarios y los periodistas prefieren Twitter, mientras que las asociaciones de pacientes, las instituciones y las sociedades científicas tienen afinidad por Facebook. ▪ El nivel de conversación también varía. Las instituciones, la industria farmacéutica y las organizaciones profesionales son muy poco proclives a la interacción. Los más conversadores son los profesionales sanitarios, aunque su diálogo tiende a la endogamia. ▪ El contenido de la conversación 2.0 es heterogéneo e informal. Cada uno habla de lo suyo. Es difícil identificar temáticas comunes porque responden a intereses de grupo y a la actualidad que marca cada periodo. Sin embargo, hay contenidos recurrentes como los medicamentos, los pacientes y la salud 2.0. ▪ Ni se habla para las mismas personas ni se interesa a las mismas personas. Predominan las microaudiencias, un universo segmentado y disperso de seguidores unidos por intereses comunes pero diferenciados. ▪ La comunidad sanitaria 2.0 no se ha constituido como una fuente de información complementaria a las tradicionales (medios de comunicación y si es de referencia del sector), aunque se observan señales luminosas de cambio. --------------------------- En mi opinión este universo es muy heterogéneo, Cada cual crea su red de contactos y habla para una audiencia que en parte es compartida. El medio es muy libre y cada cual lo usa a su manera y según su criterio. Hay que tener en cuenta que la interacción lleva poco tiempo de rodaje. Existen blogs sanitarios desde hace 5-10 años pero su explosión tuvo lugar en los 4 últimos y la interacción en redes sociales apenas lleva 2-3 años de media. Cada vez más profesionales sanitarios van a traspasar la barrera del KOL (líder de opinión) fuera de los circuitos habituales (medios de comunicación clásicos) y esto tendrá repercusiones dado que permitirá elevar la voz de los que aporten visiones críticas o avanzadas que no suelen recoger dichos medios clásicos.
No me puedo creer mucho la clasificación final del top ten que el informe aporta, pese a que el informe me incluye y me posiciona favoráblemente. Hecho en falta a profesionales y medios de calidad en los gráficos y la sistematización usada sigo considerándola subjetiva, pese al gran esfuerzo que sin duda habrán hecho los autores al manejar una ingente cantidad de información.
Es un paso adelante el poder estudiar y observar cómo evoluciona o se mueve la llamada salud 2.0 pero habrá que esperar a estudios que empleen artillería de investigación más potente.