No se si os ocurre lo mismo, pero a menudo, cuando me pongo a escribir a mano, aunque sea la lista de la compra, noto cierto agarrotamiento en mis dedos como si estuvieran olvidando el modo de manejar un bolígrafo.
La letra me sale bastante caótica, y por más que intento emular los primeros días de curso durante mi infancia y adolescencia, con la intención de hacer una caligrafía impecable, el resultado acaba siendo siempre descorazonador.
No sé si estoy exagerando, pero creo que la constante utilización del ordenador como medio de comunicación para todo, esta relegando la escritura manual al mismo nivel de la pintura rupestre….
Dicen que uno nunca se olvida de cómo andar en bicicleta por muchos años que pasen, si una vez aprendió a hacerlo. Supongo que con la escritura pasará algo parecido.
El día que no me quede otro remedio y, bolígrafo, en mano, me vea obligada a rellenar un par de folios sin ayuda de un teclado, espero recuperar la agilidad perdida.
Pero el problema, es que hoy, pocas circunstancias te ponen en esa tesitura. Si no tenemos el ordenador, esta el ipad o el móvil, que es tres cuartos de los mismo.
Y lo que más me preocupa de todo esto, es que nuestros niños y adolescentes, no lleguen nunca a dominar “la bicicleta de escribir”.
Yo guardo kilómetros y kilómetros de escritura manual entre mis recuerdos favoritos: montones de cartas a amigos, familiares y algún amor; apuntes del colegio y de la universidad, primeros bocetos de una temprana afición a la poesía… y que se yo cuantas cosas más, todas escritas a mano.
¿Cómo felicitamos la Navidad hoy en día? ¿cómo nos comunicamos con amigos? ¿cómo realizamos los trámites ante las instituciones? ¿cómo hacen los trabajos del colegio los chavales? Teclado, teclado y más teclado.
Por todo ello, quisiera animar, a padres y educadores a fomentar la caligrafía, que no es otra cosa, que ‘el arte de escribir con letra correctamente formada’, o más poéticamente, ‘el arte de escribir bello’.
Enseñemos a la juventud que una carta escrita a mano es un recuerdo para toda la vida, y que transmite mucho más de nosotros mismos, que una hoja de Word.
Dedicado a todos los Peques y Jóvenes.
Os dejamos este libro, Caligrafía una buena obra cargada de creatividad, y para los más pequeños, nos os olvidéis de los clásicos Cuadernillos de escritura Rubio para que practiquen este verano.