Revista Ciencia

Esta entrada no tiene ni puta gracia

Publicado el 23 enero 2012 por Jesuszamorabonilla
ESTA ENTRADA NO TIENE NI PUTA GRACIA
Andamos discutiendo estos días en Dialéctica y Analogía sobre si la belleza es una propiedad intrínseca de las cosas, y susceptible de comprensión apriorística como los enunciados matemáticos, o si es más bien un producto evolutivo dependiente de las características de cada especie, cultura, e incluso individuo..No se trata sólo de si las cosas que consideramos bellas son "bellas en sí mismas" (frente a la posibilidad de que lo sean sólo según ciertos criterios, que pueden ser evolutivamente, históricamente o psicológicamente contingentes), sino también de si es NECESARIO (normativamente necesario, o tal vez constitutivamente inevitable) que cualquier sujeto racional tenga la capacidad de captar la belleza... y además que lo haga necesariamente (idem) con los mismos criterios que los platónicos suponen que ellos la captan..El debate me ha llevado a pensar en otra emoción a la que todos estamos muy acostumbrados: la risa. En realidad, la risa no es una emoción, pero no conozco una palabra para designar lo que sentimos al reirnos. Tal vez la gracia, o la comicidad, aunque esto parece más bien el nombre de aquello que genera en nosotros a la vez esa emoción y la risa. Pero, bueno, usaré estos términos sin temor a malas interpretaciones..La cuestión, entonces, es si las cosas (o sucesos, o historias, o imágenes...) graciosas son "graciosas en sí mismas", o si sólo es una cierta constitución accidental, contingente (o sea, que podríamos no haber tenido) de nuestro sistema cognitivo el que hace que ciertas cosas nos hagan gracia..Análogamente, ¿es obligatorio aceptar que cualquier sujeto racional tendría que tener -para ser de verdad racional- la capacidad de reírse, de encontrar graciosas las cosas que a nosotros nos resultan cómicas (o las que deberían resultarnos graciosas, que quizá no coincidan con las que de hecho nos hacen gracia?.Si la capacidad de evaluación estética, evaluación moral, e incluso evaluación hedonística, se me hace muy cuesta arriba admitir que sean condiciones absolutamente necesarias para que un sujeto sea racional (por supuesto, no me refiero a humanos, sino a cualquier sujeto racional, ya sea extraterrestre, artificial o sobrenatural), llegados al caso de la risa el asunto me da la ídem. Realmente no veo cómo podríamos justificar que un sujeto racional debe tener la capacidad de reirse (y si no la tiene, es que no es racional, o es "menos racional" que nosotros)..Para terminar, una muestra de que los platónicos seguramente se toman muy en serio esto de la facultas hilarandi. Os transcribo a continuación la respuesta de Juan Antonio (autor del blog citado al principio) a mi pregunta de si pensaba que Rachel Weisz era objetivamente, intrínsecamente, más bella que una hembra de mandril, a pesar de que seguramente al macho de mandril le parece más bella la mona que la actriz. La respuesta es, desde luego, digna de figurar en el reino platónico de las ideas, sección chistes..
ESTA ENTRADA NO TIENE NI PUTA GRACIA.Se trata de ver si el cuerpo humano tiene un orden mayor que el de otro animal. Ya a posteriori podría saberse que sí, porque si el cuerpo humano es la materialización del humano, y el humano es un ser con mayor nivel de unidad y orden (la conciencia racional), entonces su cuerpo tiene que serlo. Como muchos han dicho, el mejor signo del pensamiento es el cuerpo humano. Así que si tú piensas que el pensamiento humano es superior al del mandril, tendrías que compartir lo que digo. Pero, incluso de manera directa, el cuerpo humano (que no es una foto estática, sino una estructura dinámica, es decir, los actos humanos) implementan muchísimo más orden que el de un mandril (que también es una estructura dinámica, pero mucho más simplista, monótona y carente de niveles de orden). Centrándose en el cerebro, el cerebro humano tiene una mayor cantidad de orden y unidad (unidad salvando el mayor orden). Y lo mismo pasa con el resto del cuerpo, que es el complemento adecuado del cerebro. Por eso el cuerpo humano ha ido evolucionando coherentemente con su inteligencia y su capacidad de encontrar bellezas más profundas.
No dudo de que todas estas cosas te harán mondarte de risa.
Enrólate en el Otto Neurath

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossier Paperblog

Revista