¿Cómo podemos mejorar la atención sanitaria en los países menos favorecidos? La impresión 3D ya ha demostrado ser un avance tecnológico clave para la medicina del futuro, como en el caso de la llegada de sistemas impresos tales como este esternón o incluso fármacos. ¿Pero podrían abaratar las impresoras 3D los dispositivos e instrumentos utilizados en hospitales y centros médicos, para que pudieran costearlos las regiones más pobres?
Las características de esta tecnología, así como su precio, rapidez y eficacia, convierten a la impresión 3D en una aliada de las zonas menos desarrolladas del planeta. Uno de los instrumentos médicos más utilizados es, sin duda, el estetoscopio, que ayuda a los profesionales sanitarios a auscultar el ritmo cardíaco o posibles ruidos respiratorios, e incluso puede servir para detectar ruidos intestinales o soplos por flujos sanguíneos anómalos.
Esta "herramienta" de trabajo, habitual en los ambulatorios y hospitales, fue inventada en 1816 por René Laënnec. El médico francés decidió crear un instrumento con el que evitar acercar el oído al pecho de sus pacientes, y comprobar su estado de salud de una forma más pragmática. Lo hizo con el desarrollo del estetoscopio, hoy formado por dos tubos de goma para los oídos y una campana y un diafragma que amplifican el sonido, aunque el estetoscopio original parezca algo más rudimentario.
La idea de Laënnec puede ser hoy implementada gracias a la impresión 3D. Un médico palestino-canadiense ha inventado un modo de crear un estetoscopio muy económico mediante impresoras 3D. Su precio ronda los 2,5 dólares, una pequeña parte de lo que cuesta un instrumento médico de marca de este tipo.
Con esta invención, el doctor pretende que este tipo de material sea accesible para las regiones menos favorecidas del planeta, donde la atención sanitaria ya es de por sí deficitaria. Ése es el caso de Palestina, país de origen del médico, donde el bloqueo de la franja de Gaza ha limitado el cuidado y las prestaciones sanitarias de los pacientes.
Para evitar este problema en Palestina y en otras zonas del mundo -afectadas por guerras o muy empobrecidas-, se propuso crear el Proyecto Glia. Esta iniciativa open-source y low-cost utiliza la impresión 3D para desarrollar instrumental médico básico de manera rápida y económica. En la imagen se puede ver una parte del prototipo diseñado y creado mediante este tipo de impresoras, que podrían cambiar para mejor la atención sanitaria en las regiones menos favorecidas del mundo.
Imágenes | Torange, Mrjohncummings (Wikimedia), Glia Project