El fútbol no deja de sorprender. Ya sea por jugadas, patadas, reacciones desmedidas o por festejos inesperados. Así ocurrió en el ascenso del fútbol español, donde Toledo consiguió el agónico triunfo ante Rayo Vallecano B y Roberto Encinas, que no había anotado el tanto, no tuvo mejor idea que abrazar al árbitro del partido en su emoción por la victoria. A los 90 minutos un impecable cabezazo de David Sanz le dio la victoria 2-1 a Toledo que había comenzado perdiendo. En la corrida de festejo, Encina se cruzó con Ceballos Silva y no pudo contener la alegría, la cual demostró con un apretón que sorprendió al juez y dejó a todos boquiabiertos..