Revista Cocina
Filetes de magro al limon con ajitos y perejil a la plancha, estilo "la huerta del apañao"
Por Carmenrosa @MicocinaCRMenudo “chapú” me habia caído, como que estaba “jartá” de cocinar, con tanta “caló” me iba a dar el “colorín” cocinando: “toquisqui”quería también puré, y es que estaban “ehmayaos” así que no podía poner en el plato los filetes “pelaos y mondaos”, una “pejiguera”, vamos que estoy “avía”, encima “por mó” del puré se iban “achicharrar” los filetes, y es que siempre “voy a tó meté” ya estaba “guarnía”, aunque parezca una “chuminá” ya “quería dar de mano” en la cocina, así que me ´”dio la picá” y dije: no me metas más “bulla”, “venacápacá”, no seas “toyo” y prepárate tu un “huevo liao”, pero sin dejar el “poyete” “empercodío”, ni los “cacharros” “esparruaos”, hazlo “apoquitapoco”…no seas “apamplao”… ¡¡ Qué “fatiga”, menuda “retahíla” he soltado !! Dirán Vds que me he vuelto “majareta” pero como soy una “mihita” “apañá”, les voy a explicar el porqué de éste comienzo.Dicen que el habla es la manera en la que un pueblo expresa la lengua que utiliza, la forma de hablar es parte de la idiosincrasia y del paisaje cultural de un lugar…..y es que Málaga (cuando digo Málaga, me refiero a toda la provincia), atesora un conjunto de palabras y expresiones propias, un sentir y una forma de ser, un lenguaje, un dialecto autóctono bastante peculiar y singular.Un vocabulario, un tesoro de palabras, con palabras muchas de ellas antiguas, usadas en un contexto diferente al habitual, mutaciones del vocabulario español; que casi más bien, llega a ser un curioso idioma, tan malagueño, tan nuestro que sin darnos cuenta, con el paso del tiempo se va borrando de la memoria de muchos malagueños. Tengo que reconocer que no es mi forma de hablar, ni tan siquiera de la inmensa mayoría de las personas que vivimos en Málaga, pero personalmente, las entiendo, las comprendo y las recuerdo; por lo que quiero, una vez más, dejar constancia de la increíble variedad de nuestra lengua, me resisto a pensar que las nuevas generaciones renieguen de éste acervo cultural, adoctrinados por la monotonía en las comunicaciones actuales, en las que las palabras se han vuelto cicateras y grises. He querido comenzar éste post como testimonio de la Idiosincrasia de la lengua malagueña, la forma de hablar de los pueblos que han dejado su huella en ésta Málaga del paraíso, ésta Málaga de palabras y palabros reinventados, de dichos populares y gentilicios extendidos por un aire perfumado de jazmín y azahar, por la bruma de las olas y los rallos del sol, desde los montes hasta el mismísimo rebalaje. La palabra de la receta “apañao” significa, alquien agradable, atento, servicial. Y el Huerto del “apañao”, era un restaurante…muy “apañao” que existía hasta hace muy pocos años en Torre del Mar.Un lugar precioso de la Axarquia malagueña, su entorno ideal, mar y montaña con un clima único que influyó para que en los años 60, el turismo creciera de manera importante, donde foráneos y lugareños suelen veranear o “peregrinar” los fines de semana en busca de la gran oferta existente de restaurantes de “pescaitos” fritos.Una población que ha ido cambiando su fisonomía, donde hubo valles y fértiles huertas, hoy encontramos grandes avenidas y edificios; con un magnifico paseo marítimo que mira al mar….. Sus orígenes se remontan a la época fenicia y griega; que durante el periodo romano se llamaba “Maenoba” y que durante la ocupación musulmana se la conocía como “Mariyyat Ballis”.Hoy en día, independientemente del turismo, Torre del Mar destaca por la producción de cultivos subtropicales, mango, chirimoya, níspero y sobre todo el aguacate (del que es el mayor productor de España), sin olvidar que en su Puerto de La Caleta, amarra la flota pesquera más grande de la provincia malagueñaPués a pesar de todo, en vez de pescado, mi familia gustaba de ir a comer carne, a la “Huerta del apañao”. Precisamente éste plato: magro al limón con ajitos y perejil a la plancha. ¿Cómo lo preparo? Ingredientes: Filetes de magro de cerdo (que estén limpios de grasas, dos o tres limones, dos o tres dientes de ajos muy picaditos, una ramita de perejil (picados finamente), sal y aceite de oliva virgen extra (a ser posible malagueño, uso en ésta ocasión de Periana, de la alta Axarquia). Los pasos a seguir: En un cuenco colocar los filetes junto con el zumo de los limones, los ajos y el perejil, (de forma que la carne quede bien cubierta), dejándolos macerar en el frigorífico tapado con papel de aluminio (suelo dejarlos durante la noche para prepararlos al dia siguiente).
En una sartén echar un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra, una vez que esté bien caliente, cuando empiece a humear echar los filetes, salar al gusto y dejarlos hacer durante unos minutos por cada lado (personalmente me gustan que queden doraditos), dándoles la vuelta de vez en cuando. Listos para emplatar, con puré de patatas, deliciosos. ¿Fácil verdad? Y de postre, un café, acompañado de hojaldre con nata, mucha nata....
Buen provecho, buen fin de semana y recuerden mi consejo: ¡¡ Disfruten de Málaga !! Merece la pena conocerla….