Para esta escritora valenciana el número catorce es, más que una cifra, un símbolo. La ha acompañado desde que vino al mundo, y es que nació en la habitación número 14 del hospital. También ha vivido en el número 14 de una calle y con 14 años terminó su primer libro.
Finis Mundi fue la obra número 14 que escribió y la primera que le publicó una editorial; de hecho, con ella ganó el Premio El Barco de Vapor 1998. La novela se encuentra dividida en 14 capítulos, según ella de manera no intencionada, aunque después ha mantenido esta estructura en muchas de sus siguientes obras.
SPOILER: En el final original de Finis Mundi, un joven monje llamado Michel se sacrifica por el futuro de la humanidad para que ésta pueda seguir existiendo al menos durante otros mil años. Sin embargo, DTV, la editorial que se hizo con los derechos de la edición alemana, creía que éste era un final marcadamente católico, de manera que Laura hubo de modificar, a su pesar, la última parte del libro. Así, para los lectores alemanes nuestro mundo se salva de todas maneras, sin que sea necesaria la muerte de Michel, quien de hecho sobrevive y pasa el resto de sus días en el remoto monasterio bretón del Mont Saint-Michel.