Hoy me he levantado animada y me he metido en faena bien pronto. A diferencia de otras jornadas, no me cuesta ilusionarme con las pequeñeces que devuelven el brillo a los días y el temple a la voluntad. Observo que se trata de desperezar el espíritu y no permitir a los pensamientos los rumbos cotidianos de la obsesión. Ahora, con la alegría propia de la victoria recién conseguida, aspiro la fragancia de vainilla de los flanes recién hechos. Este olor dulce, tan ligado al recuerdo de mi padre y el mismo que de mi persona emana según me han comentado siempre, inunda toda la casa.Algo aturdida por los recuerdos que acuden en tropel al conjuro del aroma de vainilla, hundo la cara entre las hojas de una maceta de hierbabuena. Soñadora, suspiro. El perfume refrescante de la menta se me enreda en la nariz junto con el de los flanes. En estos momentos, la vida vuelve a ser una amalgama agridulce de sensaciones, una mezcla de olores en la que predomina el de vainilla.
Así comienza su relato Mercedes, la protagonista del libro Aroma de vainilla, de Isabel Martínez Barquero, una novela que cayó en mis manos ¿por cAUsalidad? y cuyo argumento gira en torno al deseo amoroso, el amor insatisfecho, el amor no correspondido y el traicionado, los celos, el adulterio, los conflictos generacionales, los estigmas de una educación estricta, el orgullo, la tozudez, las murmuraciones sociales, la fascinación por la cultura, la ferocidad de la guerra y sus nefastos efectos posteriores, el perdón, la generosidad, los sueños no cumplidos, las expectativas rotas, el oscurantismo religioso y su antítesis descreída e iconoclasta, la locura, la muerte y la lucha por la existencia en una España llena de rencores y de atmósfera opresiva (reseña de Amazon).
Es una novela sencillamente deliciosa...como el aroma que desprende mi cocina cuando me dispongo a preparar la receta de estos flanes al aroma de vainilla con un toque sutil de naranja que me engancharon, como el relato, nada más comenzar a leerlo...Espero que a mis amigas de La Cocina Typical Spanish les guste la propuesta que les traigo con motivo de su iniciativa para este mes #entrelibrosandaelguiso en la que debíamos cocinar una receta vinculada a la literatura. ¡Vamos con ella!
Ingredientes: 2 huevos; 4 cucharadas azúcar; 1 sobre azúcar avainillado; 250 ml leche; 1 cucharada agua; ralladura de naranja; hojas de hierbabuena.
Preparación: En un recipiente apto para el microondas poner dos cucharadas de azúcar y una cucharada de agua y calentar a 700 W durante 2 minutos (primero 1 minuto y luego otro). Sacar el caramelo y repartir en los moldes para flan, moviendo para que se reparta por toda la base. Con estas cantidades salen 4 flanes individuales.
En un bol poner los huevos y batir bien con unas varillas. Añadir el resto del azúcar y el sobre de azúcar avainillado y mezclar bien. Finalmente añadir la ralladura de naranja y la leche y mezclar bien.
Repartir en los moldes y dejar reposar hasta que baje la espuma. Colocar los flanes en una fuente con agua y cocinar al baño María en el horno (180 ºC, calor arriba y abajo con ventilador) durante 35 minutos. Dejar atemperar y después enfríar en la nevera durante 4 horas. Desmoldar y decorar con unas hojas de hierbabuena ¡y a disfrutar!
Con esta propuesta participo en la iniciativa #entrelibrosandaelguiso y deseando estoy de ver todas las recomendaciones culinarias y literarias del resto de participantes. ¡Hasta el mes que viene!