Revista Cocina
Más de uno estará pensando:-"A la loca de los aove's se le ha ido la pinza. ¿Un flan con aceite???"Pues sí, y además lo he hecho varias veces porque es suave, cremoso, con un toque anisado. El aove lo hace untuoso y se funde en el paladar. Así que, antes de llamarme loca, prueba a hacerlo, porque te vas a sorprender.
¿Qué aove utilizar? Hace pocos años seguramente aconsejaría un Arbequina, que es de los más suaves y aptos para dulces, pero hoy se consiguen unos picuales, sobre todo los de cosecha temprana, que que tienen el amargor y el picor tan suaves y equilibrados que maridan de maravilla con cualquier plato de repostería. Algunos incluso son dulces al paladar, con toques de almendra o plátano, lo que nos viene de maravilla para según qué platos.
Además, en estos días estamos viendo en las RRSS cómo distintas almazaras comienzan su recolección y se ven los primeros aoves con aceituna verde.
Imágemes cedidas por Tomiko TanakaÉstas concretamente, son de Supremo. Mirad el color... ¿os imagináis el olor frutado alto, a hierba verde, a tomatera, a almendra verde... y tiene que tener un sabor... dulce, fresco, suavemente amargo y picante, a almendras y plátano.... En serio, en cualquier momento me planto en la fábrica para probarlo!!!
Imagen cedida por Tomiko Tanaka
Mientras tanto, haremos boca con este delicioso flan que, en serio, tenéis que probar porque está rico de verdad.
Ingredientes:¾ de litro de leche½ vaso de A.O.V.E. (yo he usado Supremo)1 cucharada de matalahúga (anís verde)1 rama de canelaLa cáscara de un limón150 gr. De azúcar8 huevos “M”Caramelo líquido para los moldes
Preparación:En un cazo, ponemos el aceite y lo desahumamos con el anís verde, friéndolo unos minutos a fuego medio y procurando que no se queme. Lo dejamos enfriar.
En otro cazo, ponemos la leche con el azúcar, la canela y la cáscara de limón, y cuando rompa a hervir, lo apartamos, dejando que se infusione hasta que enfríe.
Echamos el caramelo líquido en los moldes.
Batimos los huevos y le añadimos la leche y el aceite colados, y cuando estén bien integrados, lo vaciamos en los moldes caramelizados.
Lo metemos al horno, al baño María, unos 50 min., si es un molde grande, o 35 min. si son moldes individuales, comprobando con un palillo que estén cuajados.
Cuando estén fríos, los metemos en el frigorífico unas horas. Desmoldamos y servimos.
Una sugerencia: acompañado por unos frutos rojos y unos hilos de ganache de chocolate al aceite de oliva está mas "Supremo" todavía...