Un Follamascarillas es un ser histérico perteneciente junto a los balconazis a la Stasi covidiana tragacionista nacidos durante la época coronafascista de 2020.
Conocidos por creer que un puto papel o tela en la cara frena el contagio de un virus ultracontagioso y que contagia a la gente por dejar tu aliento en el monte o corriendo, donde todo de dispersa en el aire, pero que en los platós televisivos eso no pasa porque son zona libre de COVID porque tiene los techos muy altos.
Amedrentan y llaman la atención a aquellos que no han sido infectados por los medios de comunicación untados por el gobierno, el cual lo único que busca es alargar innecesariamente su obligatoriedad para sacar pingües beneficios en forma de impuestos mediante PCRs falsas.
Se les reconoce fácilmente por la mirada y por sus eventuales llamadas de atención a no-engañados así como por sus eventuales empujones o alaridos en casos extremos contra los que no tragan con la Plandemia. Solo si tienen tez blanca.
Prefieren perder toda su libertad o pfizeremboliarse y Astramoñecarse que admitir que aquello fue un engaño del gobierno, el cual delegó con esta medida la responsabilidad sobre la "efectividad" de las medidas anticovid en el ciudadano mientras la autoridades se liberaban de ella.