Como dijimos en la entrada anterior, para esta ocasión veremos otras dos nuevas filmaciones que hasta ahora eran inéditas y que demuestran la excelencia del concierto que Frank Sinatra ofreció en el Royal Albert Hall de Londres en 1962. Se trata del tema swing compuesto por Johnny Mercer en 1937 titulado Too marvelous for words y en segundo lugar, el blues hecho relajación con la saloon song por excelencia en el repertorio de Sinatra, el tema compuesto por Harold Arlen y Johnny Mercer de nuevo, esta vez en 1943, titulado One for my baby (and one more for the road) Durante 1962 Frank Sinatra estuvo acompañado en sus conciertos por un sexteto que otorgaba un caracter más jazzístico a las interpretciones. En los videos que veremos a continuación, en el escenario acompañan al cantante Bill Miller al piano, Al Viola a la guitarra, Ralph Peña al contrabajo, Irv Cottler a la batería, Emil Richards al vibráfono y Harry Klee al saxo alto o a la flauta indistintamente. Además, aunque nadie lo sabía, se trataba de parte de una gira benéfica que emprendió Sinatra. Según el músico Buddy Rich: "Sinatra tomó a seis de los mejores músicos de Los Ángeles, fletó un avión, viajó a Japón, a Londres, a Italia, pagó de su bolsillo el transporte de los músicos, los técnicos y los animadores, la comida y el salario habitual de todos ellos y el beneficio íntegro de toda la gira fue destinado a orfanatos norteamericanos. Sinatra nunca dijo nada de ello a la prensa ni al resto de los medios de comunicación. Muchas personas desconocen este rasgo caritativo del cantante y solo es comprensible si se conoce su buen corazón. Estaba hecho de una pasta diferente". El acompañamiento en One for my baby es únicamente el del pianista Bill Miller quien también acompañara a Sinatra en las célebres grabaciones de estudio que se hizo de este tema, el 24 y 26 de junio de 1958 y en directo, en París en 1962 y en Las Vegas en 1966 La actuación en este caso (entendiendo actuación como una interpretación dramática, actoral, en la que Frank asume el papel de un abandonado, perdedor, algo pasado de tragos) es de una excelencia exquisita. Y es notable la variación en el final de la canción, en el verso "But this torch that I found it better be drawned" con la palabra better y justo en las últimas palabras, cuando ya se aleja del micrófono y recuerda que el camino es largo, cantando "Mighty long" Disfrutemos de este momento:
Frank Sinatra, a la salida del concierto del Royal Albert Hall en 1962, atiende a los admiradores