Revista Cultura y Ocio
“Funny games” de Michael Haneke (1997)
Publicado el 02 septiembre 2018 por Miguel Angel Requejo Alfageme @MiguelARAlfagemSólo cuando entré en el juego que Haneke plantea con este film empecé a disfrutar de él. Hasta ese momento me estaba pareciendo un film desagradable, repulsivo y seguía viéndolo a fuerza de voluntad. Porque la rabia me estaba resultando incontrolable.¿Y en qué consiste el juego del director en esta película? Pues en vapulear al espectador. En no dejar en ningún momento que se relaje y tenga una proyección tranquila. El cine de Michael Haneke no es light, siempre escarba en los más profundo y espantoso del ser humano.Esto convierte la visión de la historia en una experiencia de una incomodidad muy perturbadora, insoportable. Pero si dejas de oponerte y te dejas llevar entonces es como un guiño y ese guiño te amansa y ya puedes ver la película hasta el final, admirando la perversidad y lo demoniaco de la intención de Haneke.¿Cuando me sucedió eso?, pues casi al final, sí, sufrí de lo lindo, cuando tranquilamente ante un hecho que no te parece nada conveniente, uno de los psicópatas, que ya ha coqueteado con el espectador varias veces, toma las riendas de la narración, literalmente, y la lleva por donde tiene que ir.Una genial artimaña que a mí me sirvió para empezar a danzar al ritmo de Haneke pero que él utiliza impertinentemente para decir: Mirad si voy sobrado que incluso diciendo a voz en grito que esto es una película os he metido el miedo, el horror y el asco en vena.Porque ésta es una película técnicamente irreprochable, el psicópata que lleva el mando está insuperable en su interpretación, las artimañas del guion son espeluznantes y el ritmo impuesto por el director una absoluta muestra de sadismo hacia el espectador. El pobre espectador que una cosa saca en claro: Ver una película en que el horror, el asco, la repulsión y las ganas de venganza que pueda sentir supere al que esta película propicia le va a costar.He visto cientos de films, muchos de psicópatas, de miedo, de horror, pero que estén a la altura de éste, ninguno. Una obra maestra. A pesar de lo terrible de la historia.Espero que hasta que pase un tiempo nadie llame a mi puerta pidiendo unos huevos, cuatro exactamente.El remake americano, no le veo la razón.