Y es que lo mío debe ser de psiquiatra, me producía una desasosegante urgencia comerme una galleta con forma de hombrecito. Antropofagia gastronómica. Y el caso es que ya lo he hecho, ¡me he liberado!, ¡todos esos años viendo pelis ñoñas navideñas (que de “eñes”) han concluido!. ¿Ha merecido la pena?, pues sí, pero vamos, sólo desde el punto de vista de disfrutar de las galletas en si. He perdido los deseos antropo-galleteros, supongo que si tenía algún problemilla psiquiátrico, éste se ha resuelto.
Ingredientes:
- 200 gr. de mantequilla
- 650 gr. de harina
- 190 gr. de azúcar moreno
- 2 huevos medianos.
- 50 gr. de miel
- 3 cucharadas (de café) de jengibre en polvo.
- 3 cucharadas (de café) de canela molida.
- Media cucharada (de café) de bicarbonato
- Media cucharada (de café) de levadura en polvo
- Una pizca de sal