Por fin puedo volver a actualizar el blog después de muchas semanas 🙂
Este mes de enero ha sido bastante locura pero por suerte ya he terminado los trabajos finales del semestre y tengo unas mini vacaciones antes de volver a ponerme a tope con la Tesis. Estos últimos días de vuelta en Ámsterdam he estado comiendo recetas bastante básicas y si me seguís en Instagram sabréis que he comido muchos días en la biblioteca de tupper.
Comer fuera de casa no significa dejar de comer bien y con un poco de organización se puede llegar a todo. Hace unos meses escribí un post sobre cómo organizarse cuando no tenemos mucho tiempo y es que con la práctica todo se vuelve más fácil. Os dejo también las entradas con ideas para comer fuera de casa que escribí en Abril y Mayo cuando por lo menos cinco días a la semana comía de tupper.
Pero no voy a mentir y la verdad es que ya tenía ganas de volver a comer tranquilamente y tener un poco más de tiempo para hacer recetas más elaboradas. Tengo muchas ideas en la cabeza, miro demasiado Pinterest y mi teléfono va a explotar de tantos screenshots que hago en Instagram con recetas por copiar.
Así que aproveché el primer día que tenía de vacaciones para hacer este plato combinado con un poco de todo lo que tenía por la nevera. Fue una comida súper improvisada pero el resultado me encantó y estoy segura que voy a repetirlo más de una vez. Creo que nunca había probado el boniato en crema porqué casi siempre lo preparo al horno pero quedó genial y le dió una mezcla de texturas al plato muy buena.
Es un plato muy completo y lleno de proteínas vegetales gracias al tofu y los garbanzos. El boniato también aporta muchos antioxidantes, fibra y betacarotenos por lo que es un tubérculo ideal para incluir en nuestra dieta (además está buenísimo). Para hacer la crema he usado también leche de almendras sin azúcar pero podéis sustituirla por cualquier leche vegetal o agua. En este caso es importante mirar las etiquetas de los alimentos para asegurarnos de que no llevan azúcares añadidos ya que es lo que hacen muchas marcas.
Finalmente decir que lo mejor de todo es mezclar todos los ingredientes a la hora de comer el plato. La mezcla de texturas queda genial. Espero que os guste la receta 🙂
Ingredientes:
- 200gr de garbanzos cocidos
- 1 boniato
- 100gr de tofu
- Kale
- Leche de almendras (o cualquier otra leche vegetal)
- Ajo en polvo
- Curry
Instrucciones:
Pelamos el boniato y lo cocemos en agua hirviendo durante 20 minutos.
En una sartén, salteamos los garbanzos con un poco de ajo en polvo. Apartamos.
Cortamos el tofu a dados y lo salteamos en una sartén con kale cortada pequeñita también. Si queremos podemos añadir ajo en polvo.
Cuando el boniato esté cocido, lo trituramos con una batidora y añadimos leche de almendras hasta conseguir la textura que más nos guste. Añadimos curry dependiendo del gusto de cada uno.
Lo mezclamos todo en un plato hondo y listo!