Gema Gómez: La sostenibilidad de coser un botón

De la moda depredadora a la sostenible hay un camino tan corto como aplicar lógica y conciencia; la revolución empieza con actos simples y cotidianos.

Entrevistamos a Gema Gómez, diseñadora, coach y fundadora de SlowFashionSpain. De ella aprendemos que hasta el simple gesto de coser un botón es relevante para la sociedad; no en vano, sus emails se cierran con esta frase optimista: “¡Entre todos podemos!”.

Háblanos de SlowFashionSpain, ¿cuál es vuestro objetivo principal?

Nuestro objetivo es salvar el mundo.

 …Bueno el mundo de la moda. Deseamos ayudar a crear esa industria alternativa y responsable, que respete medio ambiente y trabajadores y cree empleo de calidad local, para ello apoyamos a los diseñadores en tres áreas: formación, consultoría y networking mientras que divulgamos al consumidor final qué significa este concepto.

 La rapidez en los hábitos y las modas, la “fast fashion”, está íntimamente ligada a las redes sociales. ¿Algún consejo para vivir en la era de las comunicaciones, sin perder la cabeza? 

 ¿…Desconectarse? Sí, lo digo en serio. Soy usuaria agradecida de redes sociales, de hecho, Slow Fashion Spain es un proyecto emprendedor nacido de ellas, pero igual que veo que es una herramienta muy potente para emprender, para informarnos (desinformarnos también…) a menudo creo que estamos demasiado enganchados.

Nos olvidamos que hay miles de maneras de disfrutar de la vida, de enriquecer nuestro día a día. En este tema que me preguntas me parecería una gran idea pasar de ese ocio pasivo y consumista a uno mucho más creativo donde desarrollar nuestras habilidades, por ejemplo, aprendiendo a coser y a hacernos cosas para nosotros, que además sean únicas.

Tal y como la entiende la mayoría de la sociedad el “look”, y la renovación constante de ropa, ¿son compatibles moda y ecología?

Han vendido que podemos cambiar de armario tanto como queramos sin que eso cause ningún mal, y no es cierto. Cuando averiguas que el cultivo de algodón es solo el 3% del cultivo global y que usa el 25% de los pesticidas y plaguicidas usados también a nivel global, y que las abejas, tan fundamentales para nuestros ecosistemas, están muriendo debido en parte a ellos, te das cuenta de que algo no marcha bien en todo lo que nos han contado y el sistema que se ha montado.

Hay personas que cuestionan la moda ecológica por elitista, ¿existe moda “verde”, cercana a todos los bolsillos?

 Coser un botón que se ha caído y que alargue la vida de una prenda ya es un acto sostenible al alcance de todo el mundo, ¿no te parece? Quizás tenemos que aprender a cambiar los conceptos del consumo y aprender a invertir en imagen en vez de comprar moda, porque la verdad es que la gente compra mucha ropa que “almacena” en sus armarios, pero que ni le sienta bien y que a la segunda o tercera puesta ya está estropeada… si compramos menos, con mejor ojo, y prendas más adaptadas a nosotros mismos, seguro que ganamos en el cambio de chip.

¿Cómo convencerías, en pocas palabras, a una persona para que dejase de utilizar algodón convencional?

 Creo que las personas se tienen que convencer y llegar a sus propias conclusiones por sí mismas. Cuando sabes que usando algodón orgánico proteges tu salud, la de tu familia, la de todas las personas a lo largo de la cadena de producción y el medio ambiente; además cada vez más hay diseñadores que cuidan la imagen de estos productos nuevos, creo que la decisión está clara… de hecho, un consumidor concienciado es un consumidor fiel.

 ¿Crees en las sinergias aplicadas a todos los terrenos sociales? Es decir: ¿Los cambios políticos, culturales, influyen directamente en la moda?

Sí, pero en este momento en ese sentido solo creo en las corrientes que se están creando de manera natural y que no aparecen en las revistas (aún

) de moda, ni de las grandes marcas o grupos, ellos se basan en sus propias reglas de consumo, lejanas a las corrientes más alternativas a nivel social. La moda debería expresar todas nuestras inquietudes, pero ahora mismo, exceptuando diseñadores emergentes de estas corrientes, se sigue una tendencia masiva que solo invita a comprar y comprar sin cuestionar… ¿quiénes serán los primeros que pongan sobre el tapete estas inquietudes? Quizás ya lo haya hecho Patagonia con su campaña “Don’t buy this jacket”, refiriéndose a su propia chaqueta…
Recomiéndanos algunos libros y películas/documentales para hacernos reflexionar.

 El libro de Elisabet Silvestre que estoy deseando poderlo leer, ya que la he visto en un par de charlas y me parece fundamental su mensaje

http://vidasana.org/noticias-vidasana/rba-vivir-sin-toxicos.html

Prosperidad sin crecimiento, porque si queremos un nuevo paradigma económico lo tenemos que crear desde nuestras cabezas http://www.casadellibro.com/libro-prosperidad-sin-crecimiento-economia-para-un-planeta-finito/9788498883817/1945940

 Y el libro de Jaume Sanllorente La costurera de Dacca me gusto mucho porque acerca una realidad muy dura, lo que paso en el Rana Plaza, con la literatura fresca y fácil, que puede llegar a miles de personas y hacerles entender el valor de pagar un poquito mas y crear un mundo mejor…

Una charla Ted que acabo de descubrir y aún no he analizado bien pero que me parece muy interesante http://www.ted.com/talks/allan_savory_how_to_green_the_world_s_deserts_and_reverse_climate_change, y otra charla Ted de mi admirado Sir Ken Robinson, porque la educación es la base de todo, y la tenemos muy descuidada

http://www.ted.com/talks/ken_robinson_how_to_escape_education_s_death_valley?language=es

 Un mundo mejor significa…

Un mundo diverso en el que cada habitante, animal, bosque o humano, encuentra “su sitio”…