Globos de oro, de plata y de patata

Ya está aquí, ya llegó, como la nave de Yupi cada año se inaugura con una entrega de premios, con los Globos de Oro, la mejor gala de los USA porque es menos formal, los invitados están en mesas poniéndose tan agustito y las presentadoras… ¡ay, las presentadoras! Tina Fey y Amy Poehler son los Óscar de la conducción ceremonial, los Emmy del humor yanqui y, también, el amor universal.

Poehler, bebiendo con Fey por no haber sido nominada

Amy y Tina son dos piezas que hacen piezas –y trizas a más de uno- que hacen reír, como también lo hacen algunas de las nominaciones. Al menos, los globos dorados tienen menos corsé que el resto y, aunque hagan concesiones a lo trillado, siempre se acuerdan de las novedades y de algunas recién llegadas, no siempre multitudinarias, pero de indudable calidad. Así como en los Emmy es difícil que una serie consagrada como Modern family pierda ante sus competidoras, por reñida que esté la contienda, los galardones que concede la Prensa Extranjera en Hollywood son más libres, como el sol cuando amanece. Y por eso, cada año meten más sorpresas sorpresas que las de la Gemio.
Globos de mucho oro: La inclusión de Jane the virgin y The affair en las categorías de comedia y drama, respectivamente, es una de las sorpresas más agradables del año. Dos ficciones tan buenas, cada una en su género, y que han pasado prácticamente desapercibidas en la parrilla americana, obligan a levantarse y a aplaudir a los críticos como aplaudimos en casa cada uno de sus capítulos.

Pienso DE QUE voy a ganar

Globos de plata de ley: Siguiendo con el gran nivel de nominados, este es el año de la no-comedia en el apartado de comedia. Con Transparent no te tronchas, pero en algún apartado tenía que quedar nominada –ella, y su protagonista, el casi seguro vencedor de la noche Jeffrey Tambor-. ¿Para cuándo la categoría de dramedia? Siguiendo esta tendencia, están las apariciones en la lista de posibles agraciados para Girls, Shameless, Louie, Orange is the new black o Nurse Jackie. 
Globos de bronce: En la lista de lo bueno, sigue habiendo clásicos imperecederos. Y, sobre todo, clásicas. La The good wife que es Julianna Margulies se merece premio y que le pongan varios pisos, como poco. Allison Janney ya podría hacer una performance surrealista en la que pegara gritos cada dos segundos y sería carne de premio… y de admiración. Viola Davistenía reconocimiento asegurado, por ser Viola Davis y por cómo se desmaquilla, que es un arte que domina. Fargo y True detective, aunque nuevas, también tenían nominaciones varias cantadas.
Globos de Óscar: Aunque sorprendentes, los Globos de Orotambién tienen muchas estrellas en cartel. Y este año, además de la no-comedia, tienen un abultado cartel de grandes de Hollywood… en el apartado televisivo. Clive Owen, Don Cheadle, William H. Macy, Robin Wright, Jessica Lange, Kathy Bates, Frances McDormand (la gran Frances), Woody Harrelson, Matthew McConaweisemuller (o como se ponga, que yo ya he claudicado), Mark Ruffallo, Billy Bob Thornton, Bill Murray (por hacer de Bill Murray cinco minutos en Olive Kitteridge) o Jon Voight son nominados este año por sus incursiones catódicas.

Debería fumar algo más fuerte por esta injusticia

Globos de patata: Esta sección es para que cada uno la rellene con sus enfados más sonados. The leftovers o Mad men, por ejemplo, en mi caso (o el injustificable olvido de Frances Conroy como mejor secundaria, o el de special guest stars de los culebrones, como Madeleine Stowe o Connie Britton). O para criticar y considerar un drama el empeño con House of cards o que Downton abbey, a pesar de que siga siendo muy disfrutable, siga en una lista de cinco mejores dramas del año. Dramas hay muchos en la lista, pero, ay, es que nosotros no hacemos las categorías...