No se si alguna vez habéis probado los gnocchi gratinados, el toque del horno les sienta de maravilla, les aporta un toque crujiente que los hace irresistibles. Si a eso le añades ese toque de los platos primaverales con color verde y aromas refrescantes os garantizo que vais a tener un plato con el que disfrutar muchísimo. Hoy os traigo una receta sencilla y de lo más sabrosa, con colores vibrantes y alegres para llenar vuestra mesa de color y sabor.
INGREDIENTES
200 gr de gnocchi.
Un buen puñado de espinacas frescas.
100 gr. de pesto.
50 gr. de piñones.
Unos pocos piñones.
Queso para gratinar.
Dos cucharadas de pan rallado.
- Ponemos una olla al fuego y cocemos los gnocchi y los guisantes hasta que veamos que los gnocchi comienzan a flotar. Reservamos un poco de agua de la cocción y escurrimos bien.
- En un cuenco grande mezclamos las espinacas con los gnocchi, el pesto, los piñones, añadimos un poco de agua de la cocción (unas dos o tres cucharadas) y mezclamos bien.
- Pasamos todo a una bandeja de horno y cubrimos con una mezcla de queso y pan rallado. Horneamos unos 15 minutos o hasta que veamos que comienza a dorarse. Servimos.
Un plato con el que ensuciamos poco y vamos a comer estupendamente, de esas recetas con pocos ingredientes pero que combinados quedan de maravilla. Con un aire refrescante y aromático que le aporta el pesto y la costra crujiente gratinada a la que no os vais a poder resistir.
Lo podéis presentar como plato único o como guarnición, de un pescado al horno o una verduras a la plancha, será el acompañamiento ideal para cualquier asado o barbacoa, me atrevo incluso a decir que lo podríamos tomar en frío acompañado de una buena ensalada verde.
Un plato vegetariano con el que dar la bienvenida a la primavera y disfrutar de una mesa llena de sabor y de color, espero que os animéis a prepáralo, estoy seguro de que os va a encantar.