“Gracias Sara”. Nunca tuvimos tanto y nunca hicimos tan poco

Cuando yo era pequeño, no existía Internet. El año de 1969 cuando fue creado por una necesidad del Departamento de Defensa de los Estados Unidos de Norte América, cuyo proyecto fue realizado por la Agencia de Proyectos Avanzados de Investigación en Defensa (DARPANET) como protocolos de comunicación para redes de área amplia para ligar redes de transmisión de paquetes de diferentes tipos capaces de resistir las condiciones de operación más difíciles y continuar funcionando aún con la pérdida de la parte de una red, por ejemplo en caso de guerra. El resultado fue el protocolo TCP/IP que fue el germen del actual Internet de uso civil y masivo.
El conocimiento, la información, estaba en los periódicos, en los libros. Si quería investigar sobre algo tenias que cogerte un autobús irte a la biblioteca, buscan en al bibliografía, pedir los libros, revisar.
Hoy en día coges un móvil de última generación y en medio de un parque como mínimo con Wikipedia, tienes acceso a una información que antes te suponía toda una tarde de investigación en una biblioteca.
Esta revolución en el acceso a la información, estoy convencido que se estudiara por generaciones venideras como un hito y un cambio de paradigmas. Los que la estamos viviendo nos somos conscientes de la importancia de este cambio y no lo aprovechamos.
Nunca los ciudadanos del llamado “Primer Mundo” con estudios, con formación, tuvieron tan fácil el acceso a la información, a la capacidad de debate, al dialogo, a la organización etc.

Image via CrunchBase

Mientras Europa cae en una debacle financiera de la cual nos contará levantarnos, los ciudadanos inmersos en un catarsis de estupidez colectiva llevan 3 días haciendo trending topic (palabras o frases más repetidas en un momento concreto en Twitter) a “Gracias Sara”.
¿No hay cosas más importantes sobre las que hablar? Que conste que me parece que al principio pudo se una broma divertida. De una broma divertida de una hora, se ha pasado al ataque a una persona grosero machista.
El problema es la estupidez que refleja, la envidia, la falta de inquietud de una sociedad formada, con acceso a la información casi instantáneo, con herramientas inimaginables años atrás.
Nunca tuvimos tanto y nunca hicimos tan poco. Tenemos la crisis que nos merecemos, somos tontos y así nos va.TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN (TIC) DESDE UNA VISIÓN PRÁCTICA