Revista Ciencia

¡Guerra al pulgón!

Por Semillashuertayjardin
¡Guerra al pulgón!Tras una temporada hablando de todo aquello que podéis cultivar (desde los bulbos de primavera hasta las hortalizaspara huerto ecológico) ha llegado el momento de aprender a defender nuestros jardines contra las plagas y para ello, Semillas Huerta y Jardín se levanta en armas contra el pulgónBien, nuestro enemigo es un pequeño (¡mide milímetros!) insecto homóptero que chupa la savia de las plantas, robándoles el agua y los nutrientes, por lo que las debilita. Además, y esto es lo que más nos preocupa, segrega una sustancia, la melaza, que se va a convertir en el caldo de cultivo de hongos y bacterias que pueden llegar a matar nuestras plantaciones.Primero, ¿cómo evitamos vernos infectados de pulgones? La respuesta parece sencilla, aunque a la hora de llevarlo a la práctica puede resultar un poco más difícil: cultivando bien. Hace falta un riego adecuado, que las plantas reciban las horas de sol necesarias, un abonado orgánico sólido de liberación lenta, seguir el calendario de siembra recomendado, y, sobretodo, buscar la biodiversidad en nuestros jardines (a mayor variedad de plantas, mayor resistencia a las plagas).¡Guerra al pulgón!Si pese a seguir todas estas recomendaciones nuestro amigo homóptero ha conseguido apoderarse de nuestro huerto, ha llegado el momento de recurrir a armas más persuasivas y sacar el jabón potásico, un insecticida natural fabricado a base de aceites vegetales. Totalmente inocuo para personas y animales, y respetuoso con el medio ambiente, el jabón potásico nos va a permitir disminuir la población de pulgones (así como de otras plagas, como la mosca blanca, las cochinillas o los ácaros).Es apto para todo tipo de cultivos, frutales, cítricos, hortícola…, y se puede utilizar tanto en invernadero como al aire libre, así como para planas ornamentales de interior o exterior. Además, ayuda a la limpieza de las melazas y de manchas en las plantas, y a la limpieza y desinfección de maquinas y utensilios de trabajo.¿Cómo actúa? Por contacto, no por ingestión, reblandece la cutícula de los insectos, causando su asfixia e impidiendo que generen resistencias.¿Cuáles son las ventajas? No produce residuos tóxicos ni cambios biológicos en los cultivos; no daña flores ni frutos; es respetuoso con la fauna útil, pues no es tóxico para ella; no deja residuos aceitosos en las cubas de aplicación, por lo que la limpieza es fácil; y no daña el medio ambiente.¿Cómo lo vamos a usar?: Antes de usarlo, debemos agitarlo.*Dosis y aplicación -debe diluirse en agua en las siguientes proporciones, según el efecto deseado-:- Como insecticida: 8-10 c.c./litro de agua.- Como mojante: 1-2 c.c./litro de agua.- Como limpiador: 10 c.c./litro de agua- Repetir tratamiento a los 10-15 días de la primera aplicación.Lo aplicaremos mediante pulverización sobre la zona a tratar, hojas, flores y frutos. Al actuar por contacto sobre los insectos es necesario mojar bien toda la planta. Y debe aplicarse en la horas de menor insolación.Si vuestros huertos ya se han visto afectados, en Semillas Huerta y Jardín podéis encontrar este perfecto insecticida natural, entre otros muchos insecticidas, no dudéis visitar el catálogo para ver cuál es el que más os conviene.¡Importante! Casi se nos olvida, no se trata de eliminar por completo al pulgón, sino de controlarlo. No hay que olvidar que los pulgones también pueden ayudarnos, puesto que mantienen a las poblaciones de mariquitas y crisopas que regularán su población.
Y ahora sí, ¡feliz siembra!

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