Si todavía no lo has hecho, te invito a leer la primera parte de esta guía en la cual hemos compartido las principales razones por las que te podría resultar muy útil tener este pequeño electrodoméstico en tu cocina, los aspectos más importantes a la hora de elegir un modelo de slow cooker y una serie de claves para tener éxito en todas las cocciones que realices en ella.
Tabla de conversión de tiempos de cocción en una slow cooker
Utiliza esta indispensable tabla de conversión como una guía para traducir los tiempos de cocción tradicionales a tiempos para la slow cooker. Todos los tiempos son aproximados, y al hacer una receta por primera vez, asegúrate de anotar los tiempos de cocción para tener una referencia en el futuro. Recuerda que en general, una hora de cocción en high equivale a entre 2 y 2 horas y media en low.
Tiempos de receta convencional Tiempos en slow cooker en LOW
15 minutos 1 1/2 a 2 horas
20 minutos 2 a 3 horas
30 minutos 3 a 4 horas
45 minutos 5 a 6 horas
60 minutos 6 a 8 horas
90 minutos 8 a 9 horas
2 horas 9 a 10 horas
3 horas 12 horas o más
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Planificación de las comidas usando tu slow cooker
Cuando estamos decidiendo cómo y cuándo utilizar nuestra slow cooker, puede resultar útil hacerse un menú semanal. Esto te puede ayudar a determinar si necesitas cocinar una comida con antelación usando tu crock-pot y cómo utilizar las sobras para comidas durante la semana. Por ejemplo, igual asas un pollo el domingo. Después de la comida, podrías usar los huesos para hacer un caldo que se podría utilizar para una sopa o un estofado la semana siguiente.
Ciertas recetas que emplean carnes deshuesadas como la pechuga de pollo o lomo de cerdo se cocinarán más rápido que las que tienen hueso o la carne de vaca de pasto. Para las recetas que requieren de más tiempo de cocción, lo mejor es comenzar su cocción por la noche, antes de acostarnos.
Secretos del slow cooking: Una despensa bien preparada
No necesitas ser un gran chef para cocinar buena comida. Pero si eres una persona ocupada, una buena estrategia de supervivencia es tener la despensa bien abastecida para que la preparación de tus comidas sea sencilla y evites la frustración de encontrarte sin ingredientes.
En casa, todas las recetas que preparo dependen en gran parte en mi despensa, y a continuación voy a compartir contigo esa despensa a prueba de estrés, diseñada para todo tipo de elaboraciones culinarias y que consta de ingredientes versátiles que nos ofrecen combinaciones de sabor, variadas y deliciosas.
El congelador
CARNE: Carne para estofar, de vaca y cordero, costillas de cerdo y de vaca, piezas grandes para asar, ossobuco, solomillos y lomos de cerdo, pechugas, muslos y contramuslos de pollo deshuesados, albóndigas, salchichas, huesos, carcasas, cuellos, patas, etc. para caldo.
CALDO DE HUESOS: Los caldos de pollo, vaca o pescado son esenciales. Guarda tus caldos caseros, bien etiquetados, en el congelador, para tenerlos siempre a mano.
El frigorífico y las verduras
LOS HABITUALES: Mantequilla, crema agria, crème fraîche o yogur para salsas. Bacon o panceta para sopas y estofados.
SALSAS Y CONDIMENTOS: Tamari tradicional sin gluten, pastas de curry, salsa de chile picante, salsa de pescado y mostaza.
FRUTAS Y HORTALIZAS: Ten siempre a mano repollo, berzas, patatas, boniatos, zanahorias, calabaza, cebollas, ajo, chalotas, manzanas y nabos para sopas, platos vegetales y estofados. También viene bien tener limones, limas, perejil y cilantro frescos. (Las hierbas aromáticas frescas también se pueden congelar en bandejas de cubitos de hielo con aceite de oliva)
QUESOS: Si consumes lácteos de leche cruda, te aconsejo tener algún queso curado, parmesano, queso de cabra, etc. para añadir en tus platos.
La Alacena
TOMATES: El tomate en todas sus formas es un ingrediente que utilizo con mucha frecuencia en mis recetas de slow cooker, ya que es tremendamente versátil y aporta un gran sabor. Podemos encontrar tomate natural en conserva, en una gran variedad de preparaciones, entero, troceado o triturado. Procura escoger los que vienen en botes de cristal o briks en lugar de los enlatados. También es buena idea guardar tomate deshidratado y tomates secos en aceite de oliva. El tomate concentrado es muy útil para evitar que las salsas queden demasiado diluidas y además mejora enormemente el perfil de sabor de cualquier plato, dándole ese toque umami tan difícil de describir. También recomiendo tener a mano unas buenas salsas o passatas de tomate para preparar unas sencillas pero deliciosas costillas o ragú.
LECHE DE COCO: La leche de coco no es sólo un ingrediente clave en recetas de currys; también es ideal en sopas, purés y todo tipo de platos a la crema. Siempre procuro tener al menos 3 litros de leche de coco en la despensa. Es importante que utilices leche de coco sin más ingredientes que coco y agua y que esté envasada en brik (evita la leche de coco enlatada).
ACEITES Y VINAGRES: En mis recetas de slow cooker habitualmente utilizo aceite de coco, pero también otras grasas como el ghee y la manteca. Asimismo me gusta tener siempre a mano una variedad de vinagres: de vino tinto y blanco, balsámico y de sidra de manzana.
ESPECIAS: Una de mis mayores pasiones en la cocina son las especias de todo tipo, y son grandes aliadas para las recetas cocinadas en la slow cooker. Ten a mano curry en polvo, chiles enteros, en copos y en polvo, cúrcuma, comino, canela de Ceylan, cinco especias chinas, ras el hanout, garam masala… Lo que más te guste, y para gustos, los colores.
CHOCOLATE: El cacao en polvo y el chocolate negro se utilizan en salsas mole y en chili con carne.
VARIOS: Pimientos del piquillo en conserva, chipotles en adobo, atún, salmón y anchoas en conserva, aceitunas y alcaparras son buenos ingredientes para añadir a salsas, sopas y estofados. En algunas recetas también es recomendable utilizar un espesante como la harina de yuca.
Cuestiones de seguridad y optimización
- Nunca precalientes la olla cerámica antes de añadir tus ingredientes.
- Al principio de la cocción o para acelerar el proceso, cambia al programa high. En general, los tiempos de cocción en high son aproximadamente la mitad que en low. Una hora en high equivaldría a 2 – 2 horas y media en low.
- La tapa de cristal puede calentarse mucho durante la cocción, es importante tener precaución al manipularla. Mantener la tapa bien cerrada durante la cocción es esencial para lograr un buen resultado.
- Lo ideal es llenar la olla cerámica desde la mitad hasta no más de 3 cm debajo del borde. Lo mejor es llenarla entre 1/2 y 3/4 porque los elementos térmicos se encuentran en los laterales. Esto ayudará a conseguir una cocción más igualada y a evitar derrames.
- Algunas de las ollas cerámicas interiores se pueden usar en el horno, pero NUNCA sobre la placa o el gas ya que, como cualquier cazuela cerámica, ésta se rompería al contacto directo con la fuente de calor. Consulta las instrucciones del fabricante de tu slow cooker.
¿Tras leer esta guía piensas que te gustaría cocinar con una slow cooker? ¿Crees que podría ayudarte a servir en tu mesa comidas caseras, ricas y nutritivas, durante el ajetreo de la semana laboral? Si ya tienes una slow cooker, comparte con nosotros cómo ha cambiado tu forma de cocinar y tus experiencias con ella.