Los problemas de salud mental son reales, frecuentes y tratables. En Estados Unidos, 12 de cada 100,000 habitantes se suicidan.Sin embargo, factores como el estigma asociado con el suicidio y las enfermedades mentales impiden que los miembros de la comunidad latina reciban la ayuda que necesitan para ellos mismos o para sus seres queridos.
Según la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (American Psychiatry Association, APA), muchos latinos confían en sus familiares, en la comunidad, los curanderos tradicionales o las iglesias para recibir ayuda durante una crisis de salud. Como resultado, miles de latinos con enfermedad mental no siguenun tratamiento con un profesional, situación que a menudo se agrava por la falta de acceso a los servicios de salud mental locales.
UnitedHealthcareLatinoHealthSolutions recomienda a los residentes latinos que se informen acerca de los recursos que ayudan a los individuos y familias, tales como la línea de acceso y ayuda de la Red Nacional de Prevención del Suicidio. Esta línea de teléfono confidencial y gratuita atiende las 24 horas del día, los 7 días de la semana en el (888) 628-9554, y ofrece ayuda,no solo si usted o un ser querido está en crisis,sino para obtener respuesta a sus preguntas generales sobre salud mental, depresión, suicidio, recursos de salud en la comunidad, actividades de prevención del suicidio en su zona y otros temas relacionados con la salud mental
Los estudios también han revelado que los jóvenes y los adultos latinos mayores son especialmente vulnerables a las tensiones como consecuencia de la inmigración y la adaptación a la cultura. Por ejemplo, las mujeres jóvenes latinasson dos veces más propensas que los hombres jóvenes de contemplar el suicidio o intentarlo.Asimismo,para muchos estadounidenses latinos de edad avanzada el esfuerzo por adaptarse a la cultura en este país les resulta abrumador. Con frecuencia, sus valores y creencias tradicionales se contraponen a la nueva cultura, les falta apoyo familiar y se enfrentan a las barreras del idioma.
Los latinos a menudo confunden las condiciones de salud mental comunes, como depresión y ansiedad, con nerviosismo, cansancio o incluso malestar físicoy muchos lo ven como algo temporal. Este error entorpece el diagnóstico a tiempo y el tratamiento que puede ayudar a una pronta recuperación y al retorno a una vida saludable e independiente.
Los siguientes son algunos signos que pueden indicar que un ser querido necesita ayuda:
Conducta inusual o irregular. Es importante que confíe en sus instintos si observa una conducta que lo asusta, como un cambio repentino de humor o un ataque de furia, o una conducta que parezca inusual en esa persona. Por ejemplo, alguien podría estar bebiendo más de lo acostumbrado o dejar de hacer las tareas y rutinas cotidianas, como llegar al trabajo a horario o mantener las prácticas básicas de higiene.
Problemas para pensar o concentrarse. Por ejemplo, si una persona comienza a olvidar cosas o parece desorientada o intranquila.
¿La persona suele oír o ver cosas que los otros no oyen ni ven?
Emociones demasiado intensas. Podría ser ansiedad por una actividad aparentemente trivial, como salir de la casao expresiones emocionales (reír o llorar) que parecen excesivas o fuera de lugar.
Dificultad para relacionarse con los demás. ¿Surgió algún problema repentino o se están repitiendo los problemas en la relación con los demás en el trabajo o en la escuela o entre familiares y amigos?
Una experiencia traumática. Si recientemente la persona sufrió la muerte de un ser querido, un accidente u otro acontecimiento importante que alteró su vida, esto puede tener un fuerte impacto en su salud mental.
Si cree que alguien que conoce puede necesitar ayuda para tratar un asunto de salud mental, le recomendamos que hable con esa persona. Las siguientes son sugerencias para empezar la conversación:
Muestre interés sin buscar la confrontación ni emitir juicios. Hágale saber que usted siente afecto y que quiere saber qué pasa porque le preocupan los recientes cambios de conducta que observó.
Haga preguntas simples. Pregúntele cómo está, cuándo empezó a sentirse así y cómo puede brindarle apoyo. Podría ser beneficioso preguntar si la persona pensó en buscar ayuda.
Ofrezca consuelo y esperanza. Hágale saber que no está sola y que usted está ahí para brindarle su apoyo y buscar activamente un tratamiento que le haga sentir mejor.
Evite frases que podrían ser despreciativas o acusatorias. Aunque no entienda lo que siente la persona, es importante expresar solamente su apoyo incondicional.
Recuerde que los problemas de salud mental afectan a las personas de todas las condiciones, independientemente de la edad, el sexo, la cultura, el origen étnico o el nivel socioeconómico. La buena noticia es que hay muchos recursos disponibles para ayudarle a usted y un ser querido a identificar, tratar y recuperarse de una enfermedad mental.
No tema pedir ayuda. Si usted o un ser querido necesita ayuda, visite www.uhclatino.compara más información acera de enfermedades mentales o llame las 24 horas del día, los siete días de la semanagratuitamente a la Red Nacional de Prevención del Suicidio al (888) 628-9554. Todas las llamadas serán atendidas en español y serán completamente confidenciales.