Revista Ciencia
En "Sobre este blog" les dije en cierto pasaje que no solo se trata de la gracia, de la risa, que también se trata de la condición humana involucrada, de la compleja y complicada relación entre ciencia y sociedad, de la historia, de las atrocidades y la gloria, de las injusticias cometidas y de la felicidad del descubrimiento, del precio que se paga por ser investigador en este valle de lágrimas y fotones. Este artículo titulado Harlow Shapley, víctima del macarthismo, que les entrego ahora, trata en gran parte de todo eso.
En 1947, mientras el incidente Roswell iniciaba su largo camino de misterio, paranoia, negocio, marketing, complots y ensalada de distintas agencias del gobierno supuestamente involucradas, hasta llegar a los X-files, el FBI, justamente, estaba tras la pista concreta, terrenal y real de un individuo relacionado con los cielos, con las estrellas y el espacio profundo, pero sospechado de ser comunista. El 28 de marzo agentes federales en Los Angeles informaron a Washington que el supuesto simpatizante de los soviéticos había enviado una carta a un importante científico. La carta sospechosa estaba dirigida a Edwin Hubble. Y había sido enviada por Harlow Shapley. El episodio involucraba entonces nada menos que a dos de los más grandes astrónomos de Estados Unidos y de más allá de sus fronteras, responsables de nuestro actual conocimiento de la estructura del Universo y del lugar que ocupa nuestro sistema solar en él.
De acuerdo a los registros durante dos meses, en 1947, los agentes del FBI registraban la dirección de cada pieza de correo que Shapley enviaba y recibía. Una de esas cartas estaba dirigida a su viejo colega del observatorio de Monte Wilson, Edwin Hubble.
Esta extraordinaria vigilancia fue parte de los siete años de espionaje gubernamental sobre Shapley, que finalizó en 1953, un año después de su retiro como director del Colegio Observatorio de Harvard. Una copia del dossier de 461 páginas del FBI sobre Shapley continuó ampliándose con otras agencias hasta entrados los 60 (Shapley murió en 1972). A esa altura del monitoreo sin embargo, cuando los agentes conocían incluso cada minuto detallado de su vida, Shapley le dijo a un amigo que él dudaba de que la agencia estuviera siguiéndolo.
El extenso y abultado dossier muestra que los agentes del FBI se basaron en informantes en Harvard, distribuidos en la comunidad astronómica, e infiltrados en las organizaciones políticas nacionales para observar a Shapley de cerca. El FBI incluso lo espiaba en la convención de 1946 de la Asociación Americana de Observadores de Estrellas Variables (AAVSO), presidida por Shapley. Según los agentes del FBI Shapley estaba tratando de reclutar a miembros de AAVSO para realizar tareas "perversas", muy alejadas de tareas inofensivas como la medición del brillo variable de las estrellas. Pero lo que esta supuesta peligrosa actividad pudo haber sido no está claramente explicado en el archivo. El hecho es que después de siete años de cerrado seguimiento, el FBI no pudo establecer que Shapley fuera o haya sido un miembro del Partido Comunista. Algo que de ser así actualmente llevaría a uno a preguntarse "¿Y qué, si lo es?", no se consideraba inocente en esa época de caza de brujas, al menos no para el gobierno de turno.
Lo que revelan los archivos es un complejo retrato de un astrónomo al que no le gustaba lo que su gobierno estaba haciendo con las armas nucleares, un hombre ferozmente independiente y apasionado que usaba su posición como uno de los más visibles, respetados y prestigiosos de los cientificos americanos para combatir los pogroms del Comité de Actividades Anti-Antiamericanas, el HUAC (House Un-American Activities Committee) y del Senador Joseph P. McCarthy.
Lo que aparecía como sospechoso para los agentes del FBI de la pos guerra -la preocupación de Shapley por los refugiados de guerra y el bienestar de los cientificos extranjeros, así como la oposición hecha pública a los linchamientos de negros en el Sur- hoy se ve como una posición inocente. Pero no todo en los archivos es favorable al astrónomo para los estándares actuales. De acuerdo al FBI, Shapley pudo a veces ser insensible y estrecho de miras. En general, la descripción de Shapley que toma forma entre las secciones clasificadas del archivo del FBI, que todavía no fue liberado, es la de un hombre que irritaba a los oficiales gubernamentales en un tiempo en que la conformidad era considerada una virtud patriótica.
En una típica valoración de esa agencia, el archivo dice: "El informante confidencial ofreció este dato: 'El es un obstinado defensor de sus ideas y uno de los grandes egoístas de nuestro tiempo. El tiene un disgusto inherente por la autoridad e invariablemente hará lo opuesto de lo que él está diciendo o se supone que hará.' "
Shapley probablemente no estaría de acuerdo con esa evaluación.
Designado director del Colegio Observatorio de Harvard a los 35 años de edad, Shapley hizo su reputación con uno de los más espectaculares descubrimientos de la astronomía desde los tiempos en que Copérnico desplazó a la Tierra del centro del universo y Galileo apuntó su telescopio al cielo.
Cuatrocientos años después que Copérnico acabara dn Tlomeo y su Alamgesto e hiciera girar a laTierra alrededor del Sol, Harlow Shapley movió nuestra estrella incluso más allá del centro de la creación. Usando datos observacionales de las estrellas variables Cefeidas en los cúmulos globulares -basados en la relación período-luminosidad descubierta por la astrónoma, también de Harvard, Henrietta Leavitt-, que hizo en Monte Wilson de 1914 a 1921, Shapley revisó radicalmente la escala del universo, encontrando que la Vía Láctea es diez veces más grande de lo que previamente se pensaba. Pero más sorprendente que eso fue descubrir que el sistema solar no está en el centro de la Galaxia, sino cerca de la periferia. Después de algunas revisiones en los cálculos que inicialmente le daban 50.000 años luz -no había tenido en cuenta la existencia del polvo interestelar- estimó que el Sol está a unos 30.000 años luz del verdadero centro de la galaxia, localizado correctamente por él en la dirección de la constelación de Sagitario. Había destronado al Sol también de la posición que en su modelo le habían asignado William Herschel y Jacobo Cornelio Kapteyn en el centro galáctico.
De la tierra (labrada) a la luna (y las estrellas)
Pero antes de convertirse en un astrónomo de fama mundial, sorprendentemente, Shapley comenzó como periodista e incluso, lo admitió mucho más adelante, el mismo incursionó en cierta clase de espionaje.
En su autobiografía, Through Rugged Ways to the Stars, relató la vez que fue expulsado de la oficina de un candidato político en la pequeña Chanute, en Kansas. Fue echado por el candidato porque a este no le agradaba el diario en el que trabajaba Shapley. Pero el joven y audaz reportero politico descubrió que podía oir detalles de las conversaciones privadas desde afuera y registró taquigráficamente cada cosa que pudo escuchar.
Al dia siguiente, el Daily Sun imprimió palabra por palabra las notas de Shapley, malas palabras incluidas. "En consecuencia (se refiere al politico) deseaba asesinarme y deshacerse de mi cuerpo," dijo Shapley.
Tenia entonces apenas 16 años. Había nacido en Missouri el 1 de noviembre de 1885. Su hermano gemelo Horace siguió los pasos de su padre granjero, pero Shapley no quería saber nada con trabajar la tierra. Halló más excitante y divertido el trabajo de periodista, si bien no era bien pago. Pero comprendió que el jamás podría convertirse en un editor y hacer una vida decente sin un título de grado, entonces puso manos a la obra. En 1907 había reunido suficiente dinero para pagarse un año de altos estudios, hizo las valijas y partió rumbo a la Universidad de Missouri, en Columbia.
"Debe haber sido el destino..."
La escuela de periodismo de la universidad no abría sino hasta un año después y Shapley no tenía realmente idea de lo que deseaba estudiar durante ese largo tiempo de espera. Entonces lo que hizo fue abrir el catálogo de la universidad y decidirse por el primer curso que encontrara en la lista. Y el primero era "arqueología". Pero cuando descubrió que él no podía pronunciar "archaeology", salto rápido al siguiente curso: "astronomy". Debe haber sido el destino... porque Shapley halló que disfrutaba intensamente del tema. Conoció a su futura esposa entre los colegas astrónomos, y obtuvo los grados de bachelor y master en solo cuatro años.
Así es como se ganó una beca para estudiar con Henry Norris Russell (ese Russell, el de los diagramas Hertzprung Russell), el astrónomo más famoso del país, en Princeton.
Bajo Russell, Shapley hizo su reputacion resolviendo las órbitas de 90 sistemas de estrellas binarias a través del uso de complejas ecuaciones. Eso le abriria las puertas a la tarea de investigación en Monte Wilson, la cual comenzó en 1914.
Usando los telescopios de 60 y 100 pulgadas del observatorio norte de Los Angeles, Shapley hizo su gran descubrimiento acerca del verdadero tamaño de nuestra galaxia y del lugar del sistema solar en ella. Su análisis de la posición, primero la relativa y después absoluta (una vez hallada la escala cefeida de la ley de Leavitt) de los cúmulos globulares, pudo localizar el centro de la Galaxia en el centro de masa del conjunto de cúmulos y a partir de ese dato la posición del Sol en la Vía Láctea. Pero otros científicos eran escépticos con respecto a los hallazgos de Shapley, incluyendo un científico llamado Heber Curtis, del observatorio Lick, en las afueras de San José.
George Ellery Hale, otro de los grandes astrónomos, de Monte Wilson, lo convenció de ir a Washington, D.C. en 1920 y promover sus ideas en un debate amigable frente a frente con Curtis.
El Gran Debate
El evento terminó llamándose el Gran Debate, aunque Shapley en parte quedó fuera de proporción, algo descolocado. Se dio una situación irónica, una simetría de error y escepticismo. Curtis no aceptaba como válido aquello en lo que Shapley no se equivocaba y Shapley era escéptico acerca de aquello en lo que Curtis estaba en lo correcto. Así las cosas, Shapley estaba listo para convencer a sus oyentes de que la Via Láctea era mucho más grande de lo que previamente se pensaba y que el sistema solar está muy lejos de su centro. Pero Curtis, después de relevar y dudar de algunos de los datos de Shapley, y apoyado en sus propias investigaciones, por ejemplo relacionadas con el estudio a fondo de la Nebulosa de Andrómeda (todavía no era reconocida cómo galaxia por toda la comunidad científica) argumentó algo diferente sobre ese punto de la discusión: que las "nebulosas espirales" eran galaxias externas a la Vía Láctea y que la de Andrómeda estaría a una distancia de cientos de miles de años luz. Eso incluso no fue aceptado, ni mucho menos que eso, por otros astrónomos. Uno de ellos era justamente Shapley, quien apoyado en datos erróneos, que indicaban que las nebulosas estaban cerca, dijo que Curtis estaba equivocado. Ambos estaban en parte en lo correcto: la Vía Láctea es extremadamente grande, el sistema solar está en la periferia y las nebulosas espirales resultarían ser galaxias externas a la nuestra (Eso sucedió tiempo después de ese debate, a finales de 1923, Hubble localizó cefeidas en la nebulosa de Andrómeda, que permitieron calcular la distancia a la misma. Pero Shapley finalmente se convertiría a esa nueva concepción del Universo, aceptando la existencia de otras galaxias y considerando incluso inadecuado el término "nebulosa" para la que debía ser considerada "galaxia" con todas las letras, como la nuestra).
Volviendo al Gran Debate, la notoriedad del evento ayudó a que Shapley ingresara como director del Observatorio de Harvard un año después, en 1921. Por los siguientes 31 años expandió enormemente la investigación en la institución, convirtiéndola en algo más que un establecimiento de enseñanza.
En las agitadas aguas de la política
Como director del Observatorio de Harvard, Shapley se halló a sí mismo en las cercanías de la politica nacional y tomo ventaja de ello. Abiertamente liberal, Shapley ayudó activamente a los científicos europeos a escapar de los regímenes fascistas de España y Alemania en los años 30 y 40, ocupándose además de que tuvieran trabajo en Estados Unidos.
Frente a la histeria anti-radical de la posguerra, en la que cayó preso Estados Unidos, las actividades políticas de Shapley lo convirtieron en uno de los tantos intelectuales, artistas y periodistas investigado por lazos comunistas por el temible Edgard J. Hoover, director del FBI.
Era bien sabido que Shapley renegaba de los anticomunistas en el Congreso. En 1946, John E. Rankin, miembro del HUAC citó a Shapley para interrogarlo acerca de contribuciones de campaña hechas por una organización liberal que el presidía.
Lo que Shapley no sabía era que cuando recibió la citación en noviembre, el FBI ya lo tenía desde hacía más de cinco meses bajo estrecha vigilancia. Sellado como "SECRET", el fuerte dossier de Shapley recién fue desclasificado en 1998. En un tono oficial tranquilo, los archivos del FBI describen el pasado de Shapley y sus conexiones con varios políticos y organizaciones profesionales. En una sección acerca de la citación de Rankin, el reporte discute conversaciones privadas y conferencias abogado-cliente que Shapley sostuvo para preparar su aparición ante el comité del Congreso. Aunque no menciona el espionaje electrónico en ninguna parte del extenso informe, tales descripciones de las conversaciones privadas sugieren que el teléfono de Shapley estaba intervenido.
Según alguien asociado al astrónomo, por ejemplo, Shapley admitió que poseía las conexiones políticas para anular la citación de Rankin, pero eligió enfrentar al demócrata del sureste en una confrontación que él esperaba llevaría al fin de la HUACA misma.
Este episodio generó un gran negocio publicitario. Después de la tempestuosa sesión a puerta cerrada del 15 de noviembre, Rankin y Shapley emergieron de entre un estallido de flashes. "Yo jamás he visto a un testigo tratar a un comité con más desprecio," dijo Rankin. Shapley, mientras tanto, acusó a Rankin y al HUAC de usar los "métodos de la Gestapo".
El comportamiento de Shapley en esa reunión a puerta cerrada rápidamente se convirtió en tradicional entre aquellas personas que objetaban al HUAC y sus tácticas.
De acuerdo a la versión de Shapley de la tensa reunión, que sostuvo al día siguiente con sus colegas de Harvard, con Bart J. Bok y otros, Rankin había objetado que Shapley hizo su presentación en la audiencia con un abogado. Así como que Rankin hacía maniobras para dejar a su abogado fuera de la habitación. Rankin entonces notificó que Shapley trajo una secretaria que tomaba notas. Rankin la sacó del lugar y le dijo a Shapley que el comité le proveería de su propio registro de la audiencia. Shapley contó entonces que Rankin explotó, cuando él, echando mano de su antigua capacidad adquirida cuando era periodista, en una época que no había grabador, comenzó a tomar nota taquigráfica de los procedimientos. Enojado porque Shapley, contra viento y marea, continuaba defendiéndose a sí mismo, Rankin se aproximó a él y alejó sus notas taquigráficas, terminando la audiencia abruptamente.
Pero los archivos del FBI sugieren que hubo más que ese problema en la audiencia, y que Rankin estaba agresivo y alterado por mucho más que por la habilidad de Shapley para tomar notas rápidamente.
Enseguida, después del incidente, Shapley habló por teléfono con un amigo para contarle sobre lo sucedido y recordándole que "incluso las paredes tenían oídos". Aquella conversación está detallada en el archivo del FBI. Shapley le dijo a su amigo que él y Rankin discutieron sobre los esfuerzos de Shapley para traer científicos a América con la ayuda del Comité Conjunto Anti-fascista de Refugiados (Joint Anti-Fascist Refugee Committee). Rankin dijo que el JAFRC era una organización comunista; Shapley lo negó.
Despues de alguna discusión y cruce de argumentos, Rankin pasó a una carta que Shapley había escrito a Martha Sharp, una candidata a congresista por Massachussetts. En aquella época Shapley era presidente de una organización politica estatal apoyada por la izquierda, el Comite de Ciudadanos Independientes de las Artes, las Ciencias y las Profesiones (ICCASP), el cual había dado fondos para la campaña de Sharp. Por razones políticas, Sharp no hizo pública su aceptación del dinero.
Shapley dijo que él respondería a las preguntas acerca de esa carta si Rankin admitía que un operativo del Congreso había destruído su oficina y robado material de ella, en un intento por desprestigiarlo y ensuciar sus antecedentes.
En este punto, dijo Shapley, Rankin lo trataba con desprecio. Estos tratos fueron repetidos, dijo él, cuando Rankin descubrió que Shapley no había traído los documentos del ICCASP que él había ordenado.
A su regresó a Harvard, Shapley se encontró con que se habia convertido en un héroe para sus estudiantes. Su desafio al HUAC incluso lo convirtió en un ciudadano aún más importante de lo que era a nivel nacional, algo que más tarde sería una bendición a medias. Como resultado de la batalla con Rankin, Shapley era solicitado frecuentemente para hablar acerca del HUAC, la política externa de Estados Unidos y las relaciones con la Unión Soviética. El FBI, mientras tanto, continuaba observando de cerca los movimientos de Shapley.
Moscú, 1945: Sexo, alcohol y lisonjas
En 1945, por ejemplo, Shapley fue uno de los científicos que tomó ventaja del fin de la guerra para viajar a Moscú al cumplirse el 220º aniversario de la Academia Rusa de Ciencias. Un profesor de Yale le dijo al FBI que Shapley había manejado las invitaciones para los cientificos americanos y un informante del FBI, que estaba presente, les dio a los agentes una descripción del evento: "(redactado) relata que a los científicos visitantes se les otorgaba uno de tres tipos de tratamiento por sus hermanos soviéticos:
1 - Quienes se entregaban a las bebidas alcohólicas, rápìdamente se intoxicaban y permanecían en ese estado durante su permanencia en Moscú.
2 - Quienes eran más susceptibles a los encantos del sexo opuesto hallaban satisfecho cada uno de sus deseos.
3 - Y quienes tenían una moral de alto calibre, en opinión del informante, pero eran susceptibles al reconocimiento de sus capacidades, eran tan elogiados que tenían pocas oportunidades de hacer otra cosa que escuchar estas odas escritas en su honor.
Shapley estaba constantemente en cualquiera de las categorías primera y tercera."
"Simpatía por el demonio... comunista"
Repetidamente, Shapley era acusado de abrigar simpatías por aquellos intereses soviéticos paralelos. Un reporte de 1947 afirma que Shapley promocionó una "línea política no muy diferente de la del Partido Comunista de Estados Unidos". Como un ejemplo, el escritor del reporte sin nombre menciona los esfuerzos de Shapley para convencer al Congreso de establecer la National Science Foundation (hoy la NSF suscribe más de 3.000 millones de dólares de las actividades científicas en el país, pero en 1947, el esfuerzo para darle a los científicos fondos del gobierno era visto como algo radical e indeseable por los agentes del FBI).
El FBI también se interesaba en el ateísmo de Shapley. Llamándolo un "adorador en el templo de la Ciencia", un agente notó que Shapley trabajaba en el día de navidad de 1946, como un gesto de su falta de fe. Pero el reporte destaca que Shapley mostraba respeto por la fe de otras personas: "El jamás ha intentado, según el conocimiento de estos informantes, interferir con las creencias o tradiciones de otros".
Menos favorable es el informe que habla de algunas pocas ocasiones en las que como profesor abusaba de las personas en posiciones menos poderosas. En 1947, de acuerdo al archivo, uno de los estudiantes de Shapley, financiado por el ejército, le había enfurecido por ridiculizar su activismo político. Shapley entonces presionó a un encargado residencial para que castigara al estudiante. En otro episodio Shapley se negó a pagarles a las estudiantes del Colegio Ratcliffe un salario mínimo por el trabajo matemático esclavo en el observatorio (en esa época, a falta de computadoras, incluso mucho antes, se acostumbraba apelar a las llamadas "calculistas"). Las jóvenes mujeres renunciaron en protesta y él dijo que "prefería vivir sin ellas que pagar 75 centavos la hora".
En 1948, el FBI se había convencido de que no había una conexión entre Shapley y el comunismo: "...no hay información o evidencia que indique que Harlow Shapley sea, o haya sido, un miembro de cualquier partido comunista", se lee en un reporte fechado en marzo 27. Muchas veces el FBI se refiere a un informante de Boston, que afirmaba que Shapley era un miembro oculto del partido comunista, pero esto no convenció a la agencia de la existencia de un lazo real. Shapley era repetidamente criticado por albergar puntos de vista procomunistas y por hablar negativamente acerca de la politica exterior de Estados Unidos, pero en general , se lo describe como un voluntarioso individualista: "(redactado) ... Shapley es de naturaleza demasiado independiente como para ser miembro de cualquier partido comunista".
Después de marzo de 1948, Shapley comenzó a disminuir su actividad política. En 1949, de acuerdo a un reporte, le prometió a la administración de la escuela que evitaría la mala publicidad.
El perfil bajo de Shapley, sin embargo, no lo mantuvo a salvo del senador Joseph P. McCarthy, que lo atacaría al año siguiente.
Durante una reunión del comite, en marzo de 1950, el senador por Wisconsin acusó a Shapley de pertenecer a 36 organizaciones de frente comunista y de ser un personaje desagradable.
Shapley llamó a los cargos del senador "tonterías histéricas", y dijo "Yo únicamente digo que el senador tuvo éxito en decir seis mentiras en cuatro oraciones... probablemente un record, puertas adentro, de la mendacidad".
Al finalizar el año, un subcomite del senado limpió a Shapley de todas las acusaciones de McCarthy. En 1952, Shapley alcanzó la edad de 66 años requerida por Harvard para retirarse. En todos esos años como director había supervisado proyectos masivos producidos por 25 grandes telescopios alrededor del mundo, además del Catálogo Shapley Ames de Galaxias Externas.
Después de su retiro continuó trabajando en el observatorio y dictando clases. Mientras tanto, el FBI continuó manteniendo un ojo sobre él. Aparentemente, sin embargo, asignaron un agente menos experto para mantener ese ojo sobre el famoso científico. En un reporte de 1953, en una entrada en el archivo de Shapley se lee: "aunque el Sujeto es el director retirado del Observatorio de Harvard... él continúa estando activo como profesor de astrología". Alguien, posteriormente, tachó esa palabra y escribió arriba "astronomy".
Fotografías
Crédito: Observatorio de Harvard.
Fuentes consultadas
• Ortega, Tony. Red scare at Harvard. Astronomy, Enero 2002, Vol. 30, Nº 1.
• Jeans, James. Historia de la física. Fondo de Cultura Económica.
• Abetti, Giorgio. Historia de la astronomía. Fondo de Cultura Económica.
• Asimov, Isaac. El universo. Alianza Editorial.
• Bart J. Bok. La galaxia de la Vía Láctea. Scientific American, mayo 1981, Nº 56.
• Payne Gaposchkin, Cecilia. Introducción a la astronomía. EUDEBA.