No puedo más con la moda del Mindfulness como varita mágica para resolver problemas. El "mindfulness" ha venido a sustituir a la autoayuda en la moda de juguetes para adultos. Primero tuvimos la autoayuda, luego el coaching y ahora tenemos el mindfulness que por supuesto viene disfrazado con todo el kit de remedios milagrosos: unas gotitas de anglicismos, otras gotitas de sabiduría milenaria (budismo), un ligero barniz médico y unos cuantos expertos salidos de la nada que llevan (según ellos) una eternidad practicando estas técnicas milenarias.
¿Tengo algo en contra de que la gente haga mindfullness o se concentre plenamente? No. Tampoco tengo nada en contra de que hagan el pino puente con doble rondanda para relajarse, se traguen 20 episodios de los simpsons o hagan cupcakes como para alimentar a media provincia.
El fanático del contorsionismo, el adicto a la teleberza y la reposteréxica realizan todas esas actividades simplemente porque les gusta, les relaja o yo qué sé.
El problema de los adictos a concentrarse es
que no contentos con tener un vicio relajante han decidido disfrazarlo de virtud y venderlo al planeta como la panacea para los problemas diarios.
¿Que tienes estrés? Mindfulness.¿Que quieres aumentar la autoconciencia? Mindfulness¿Que tienes síntomas físicos y psicológicos del estrés? Mindfulness.¿Que tienes el sistema inmunológico débil? Mindfulness.¿Que tienes la tensión arterial un poco alta? Mindfulness.¿Que tu niño va reguleras en el colegio? Mindfulness educativo.¿Que el curro te estresa? Mindfulness ejecutivo.¿Que tu relación de pareja fracasa? Mindfulness de pareja.
Cambia mindfulness por cupcakes y verás qué ridículo es todo.
Paparruchas. Todas. Y no lo digo yo, que lo digo, lo dice un estudio científico que llega a la conclusión de que la meditación tiene un efecto mínimo o nulo en rebajar el estrés, ayudar a curarse de una depresión o relajar. Las evidencias de que mejore el sistema inmunológico, te haga dormir, comer o tener mayor bienestar son inexistentes.
Hacer mindfulness, concentrarte plenamente o prestar atención al momento presente no mejoran tu vida para nada. ¿Estoy diciendo que no haya que pensar? No, claro que no. Conviene dedicar un rato de vez en cuando a mirarse un poco, volverse del revés, y pensar con calma saliendo de las prisas diarias. Yo lo hago todos los días en el coche pero ni creo que eso vaya a solucionar todos mis problemas ni vendo motos. Pensar, y cualquiera que lo haya hecho lo sabe, jode bastante. Pensar la solución a un problema laboral, darle vueltas a un conflicto en el curro no mejora en nada tu bienestar ni nada por el estilo. Solucionarlo es lo que relaja un huevo.
Concentrarse en uno mismo, desgarrarse por dentro hasta conocerse tanto que te dé miedo no es para nada relajante, ni empatizante ni ninguna de esas majaderías. Jode bastante, aunque hay que hacerlo.
Pensar y conocerse no es bonito, ni relajante, ni mejora tu vida, ni te hace dormir mejor. En realidad para conocerte hay que ser muy valiente y tener los huevos de decir "vaya mierda de pavo que soy" o "menuda putada he hecho" o "cómo pude ser tan idiota". Y hay que tragarse eso, con todas las espinas, digerirlo y tirar para adelante.
Con los problemas no hay que hacer bolitas de plastilina de tanto darle al mindfulness. La vida tiene mil aristas finas que raspan y rozan y desgarran y hay que arañarse y herirse con ellas. Dedicarse a transformarlas en bolitas suaves de plastilina para engañarse a uno mismo pensando que ya no pinchan es una memez, una infantilidad pasmosa y una irresponsabilidad. Esas bolitas tan monas de plastilina tienen dentro una bola de plomo. Prueba a tragarlas.
Los problemas se pueden pensar en círculo eternamente, sentado con las piernas en cruz y haciendo ommmmm y creyéndote que estás en comunión con lo que sea. Pero cuando tengas agujetas en las piernas, estés afónico de hacer omm y se te haya quedado el culo helado el problema seguirá ahí.
Lo que soluciona los problemas es pensarlos y después levantarte, cogerlos, despedazarlos e ir tragando los trozos poco en poco para ir solucionándolos.
¿Quieres hacer mindfulness? Por mi estupendo. Pero no me vendas motos.
Y si quieres relajarte, ser consciente de ti mismo al 200 %, ser consciente del momento presente, bajar tu tensión arterial y dormir como un bendito, nada como el sexo.
Y eso sí que es una práctica milenaria, se llama follar.