Sí ya sé que en España hace fresquirri, vamos que estáis "pelaós" de frío pero aquí estamos con el calorcillo de la época seca, además a mí siempre me ha gustado comer helados tanto en verano como en invierno, ¿por qué no?.
Y este helado se lo dedico a nuestra hija Sandra, el otro día por teléfono me dijo que hacía mil años que no hacía ese helado, madre mía, es verdad y no recordaba muchas cosas que mi hija me contó, en esa época vivíamos en Túnez y dice que le mandaba a comprar las almendras a una tiendita cerca de casa, que luego las tostaba en la sartén, las picaba y hacía el helado... este verano cuando vayamos te lo haré, ¡lo prometo! y esto es un adelanto.
Aquí no es fácil encontrar almendras y son bastante caras y como me había traído unas tabletas de turrón de Jijona del blando pues me puse a ello y de verdad que ha salido delicioso.
Super fácil, yo lo he hecho así, batimos un paquete de nata y un bote de leche evaporada, los dos bajos en grasa, la tableta de turrón y eché menos de la mitad de un bote de leche condensada que me quedaba también 0% grasa.
Lo puse en un bol de plástico y lo metí al congelador, me puse la alarma y cada media hora lo removía hasta que ya se congeló.Está buenísimo, cremoso y no demasiado dulce.
También hacía mil años que no usaba estas copas tan chulas.
Sandra espero que te ya haya gustado, este veranito lo podrás degustar.
El sábado fuimos al veterinario y Ares se subió tan contento al coche, ja, ja, ¡mas mono!.