Así que aquí estamos...Con diferencia, estos huevos rotos con morcilla es uno de mis platos favoritos y que siempre pido cuando salimos de tapeo. Me parece "sublime" (jajajajajaja) la mezcla de sabores de las patatas, los huevos y la morcilla y, en este caso, le hemos dado un toque adicional de queso que le ví una vez a Karlos Arguiñano y que tengo que decir que queda fenomenal. Pues hala, ¡a cocinar!
Ingredientes: 1 huevo por persona; 1 patata pequeña por persona; 1/2 morcilla de Burgos por persona; queso emmental rallado; sal; pimienta; pimentón.
Preparación: Pelar y cortar las patatas en rodajas y freir en abundante aceite a fuego medio/suave para que no queden crujientes. Freir los huevos en abundante aceite y reservar.
Quitar la piel y desmigar la morcilla, salteándola en una sartén sin aceite (con la misma grasa que desprende es suficiente) mientras la aplastamos con un tenedor.
Disponer las patatas fritas extendidas en una fuente y salpimentar. Colocar encima el queso rallado que, con el calor de las patatas, se fundirá. Después añadir los huevos fritos, salpimentar y, por último, la morcilla. Espolvorear con pimentón al gusto para decorar.
En la mesa, justo antes de servir, con dos cuchillos "rompemos los huevos" y mezclamos bien con el resto de ingredientes. ¡Insuperable!
Con esta receta quiero participar en la iniciativa "Recetas con huevo" de La cocina Typical Spanish, porque me encanta todo lo que proponen...¡y más si lleva huevo! Aquí tenéis todas las propuestas.
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